08 Julio 2014
LISTO PARA ACTUAR. Joachim Löw quiere que su equipo logre sacar a Brasil de su Mundial para poder alcanzar la gran final. reuters
BELO HORIZONTE.- Joachim Löw está lejos de conformarse con disputar la semifinal del Mundial hoy ante los anfitriones. El DT de Alemania quiere más. Quiere que su equipo llegue a la final nada más y nada menos que para escribir “historia” del fútbol.
“Realmente queremos jugar el 13 de julio en el Maracaná de Río de Janeiro”, advirtió Löw, seguro de que lo primero será dejar en el camino a la Selección carioca y después se acrecentarán sus chances de hacer historia con los germanos.
Igualmente, el entrenador está muy entusiasmado con la semifinal en Belo Horizonte, a la que consideró como un momento único. “No se puede desear nada más bonito que el duelo con Brasil. Tal vez ganar la final, claro. Eso es lo máximo, es algo insuperable”, dijo frotándose las manos con la chance que se juega hoy en el Mineirao, de Belo Horizonte.
Pero el DT sabe que nada será fácil. De hecho, pronosticó cómo será el partido ante un Brasil que está en busca del “hexacampeonato” en su Mundial, en su tierra, lo que acrecienta dificultades. “Vamos a tener un buen plan y daremos pelea a los brasileños. Las posibilidades están igualadas. Serán detalles lo que decida quién avanza a la final”, adelantó el armador de un equipo alemán que llegó a donde llegó tras descubrir un juego colectivo que ayuda a los goleadores para cumplir su tarea.
Ese juego de menos a más que fue mostrando Alemania en los últimos partidos es lo que dejó conforme al técnico: “a lo largo del torneo fuimos afirmándonos. Estamos estables, tanto física como psíquicamente”.
Como ya hicieron diversos integrantes de su Selección, Löw también lamentó la baja de Neymar, la gran estrella de Brasil. “Es un jugador maravilloso, entonces es una pena y una mala suerte que sea baja ahora. Le deseo que se recupere lo más rápido posible, que pueda volver rápido a la cancha y que logre afrontar de un modo positivo este contratiempo”, soltó Löw, ante todo respetuoso y considerado. Aunque con ganas de usar para favor de Alemania la ausencia del astro. ¿Lo logrará? ¿Podrá, finalmente, quedar a un paso de hacer historia?
“Realmente queremos jugar el 13 de julio en el Maracaná de Río de Janeiro”, advirtió Löw, seguro de que lo primero será dejar en el camino a la Selección carioca y después se acrecentarán sus chances de hacer historia con los germanos.
Igualmente, el entrenador está muy entusiasmado con la semifinal en Belo Horizonte, a la que consideró como un momento único. “No se puede desear nada más bonito que el duelo con Brasil. Tal vez ganar la final, claro. Eso es lo máximo, es algo insuperable”, dijo frotándose las manos con la chance que se juega hoy en el Mineirao, de Belo Horizonte.
Pero el DT sabe que nada será fácil. De hecho, pronosticó cómo será el partido ante un Brasil que está en busca del “hexacampeonato” en su Mundial, en su tierra, lo que acrecienta dificultades. “Vamos a tener un buen plan y daremos pelea a los brasileños. Las posibilidades están igualadas. Serán detalles lo que decida quién avanza a la final”, adelantó el armador de un equipo alemán que llegó a donde llegó tras descubrir un juego colectivo que ayuda a los goleadores para cumplir su tarea.
Ese juego de menos a más que fue mostrando Alemania en los últimos partidos es lo que dejó conforme al técnico: “a lo largo del torneo fuimos afirmándonos. Estamos estables, tanto física como psíquicamente”.
Como ya hicieron diversos integrantes de su Selección, Löw también lamentó la baja de Neymar, la gran estrella de Brasil. “Es un jugador maravilloso, entonces es una pena y una mala suerte que sea baja ahora. Le deseo que se recupere lo más rápido posible, que pueda volver rápido a la cancha y que logre afrontar de un modo positivo este contratiempo”, soltó Löw, ante todo respetuoso y considerado. Aunque con ganas de usar para favor de Alemania la ausencia del astro. ¿Lo logrará? ¿Podrá, finalmente, quedar a un paso de hacer historia?
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