LO HIZO CHACANA. De 9 para los suplentes, Lucas empató el partido, 1 a 1. LO HIZO CHACANA. De 9 para los suplentes, Lucas empató el partido, 1 a 1.
24 Julio 2014
De a poco comienza a aparecer el San Martín que todos sueñan en La Ciudadela. Contra Gimnasia de Jujuy, la segunda prueba en el laboratorio de Osvaldo Bernasconi fue exitosa; casi sin fisuras. El DT movió las fichas, reordenó la fórmula y el resultado fue satisfactorio. El equipo dio un vuelco de 180 grados y sepultó las dudas post primer clásico con un rendimiento que ilusionó a propios y extraños.

Bernasconi cambió esquema y nombres. Dejó de lado el 4-2-3-1 y armó un clásico 4-4-2 y la jugada le salió perfecta. Lucas Bossio fue un “león” en la mitad de cancha mientras que Matías Galvaliz le dio siempre buen destino a la pelota. Así, San Martín puso contra las cuerdas a un Gimnasia con sueños de Primera.

El 1-0 final del partido entre los titulares de ambos equipos, gentileza de Gonzalo Rodríguez, le dibujó una sonrisa al DT: “siempre que el equipo gana y juega buen fútbol se facilitan las cosas”, dijo Bernasconi, quien pidió un poco de calma. “Este fue el segundo partido amistoso que jugamos y quedan muchas cosas por seguir corrigiendo”.

San Martín demostró que se movió bien en el mercado de pases. Conjugó buen pie y sacrificio; una mixtura esencial en el sinuoso camino al cielo. Ahora sólo debe ensamblar las piezas y aceitar la máquina. “Estoy muy conforme con el plantel que se formó y con la predisposición de los muchachos. A medida que el equipo adquiera mayor rodaje el rendimiento irá en aumento”, prometió el DT.

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