29 Julio 2014
CONFORME. Marcelo Rubino -primero de la derecha- está conforme con las incorporaciones de Jorge Mustafá, Abel Olmos, Juan Carrizo y Nicolás Segura.
Bella Vista está frente al mayor desafío de su historia futbolística. Pero eso no asusta a los integrantes del plantel. Al contrario, los motiva saber que los “gauchos” puedan ganarse un lugar en los torneos de ascenso del Consejo Federal.
Para que este nuevo objetivo se pueda potenciar, los directivos volvieron a confiar en Marcelo Rubino. El técnico conducirá el plantel que se quedó con una de las plazas que el Torneo del Interior tenía reservada para el Torneo Federal B.
“Llegó el momento de reafirmar todo lo bueno que realizamos. Ganar esta plaza nos llenó de satisfacción pero ahora queremos otro ascenso. Para que eso no sea sólo una expresión de deseo, tratamos de sumar jugadores de experiencia que considero que serán importantes para luchar por este ambicioso objetivo. Por la calidad del plantel que estamos formando, no ascender, en lo personal, lo consideraré un fracaso”, indicó el entrenador que tiene a Javier Arias como ayudante de campo y a Enmanuel Parra como preparador físico.
Una idea fija
El técnico reconoce que los hinchas no se conformarán sólo con ver al equipo participando en el torneo. “Me parece bien. Bella Vista tiene que convertirse en uno de los mejores equipos de la región. La convocatoria que tiene así lo exige. Jugar con tanta cantidad de gente, tanto de local como visitante, es una hermosa sensación que muchos nos envidian”, resaltó.
Aunque los dirigentes son cautos a la hora de sumar refuerzos, se conoció que los “gauchos” están cerca de concretar la incorporación de Héctor López. El “Arenero” desechó un ofrecimiento de Tristán Suárez y se mostró interesado en jugar en Bella Vista.
Abel Olmos, luego de jugar durante varias temporadas en San Jorge, regresó al club que lo vio nacer futbolísticamente. Allí se dará el gusto de volver a jugar junto a su hermano Gastón, quien fue uno de los artífices del subcampeonato Anual liguista logrado en la temporada 2013.
“Es una enorme satisfacción volver a jugar en mi querido club. En estos días que estoy trabajando con el plantel, me di cuenta que tomé la decisión correcta”, sostuvo Olmos, mientras recibía el cariño de los pibes que se llegaron al estadio para ver la práctica.
Abel y Gastón tendrán la chance de jugar con hinchada propia, porque toda su familia lo acompaña al equipo de Bella Vista a todos lados.
Para que este nuevo objetivo se pueda potenciar, los directivos volvieron a confiar en Marcelo Rubino. El técnico conducirá el plantel que se quedó con una de las plazas que el Torneo del Interior tenía reservada para el Torneo Federal B.
“Llegó el momento de reafirmar todo lo bueno que realizamos. Ganar esta plaza nos llenó de satisfacción pero ahora queremos otro ascenso. Para que eso no sea sólo una expresión de deseo, tratamos de sumar jugadores de experiencia que considero que serán importantes para luchar por este ambicioso objetivo. Por la calidad del plantel que estamos formando, no ascender, en lo personal, lo consideraré un fracaso”, indicó el entrenador que tiene a Javier Arias como ayudante de campo y a Enmanuel Parra como preparador físico.
Una idea fija
El técnico reconoce que los hinchas no se conformarán sólo con ver al equipo participando en el torneo. “Me parece bien. Bella Vista tiene que convertirse en uno de los mejores equipos de la región. La convocatoria que tiene así lo exige. Jugar con tanta cantidad de gente, tanto de local como visitante, es una hermosa sensación que muchos nos envidian”, resaltó.
Aunque los dirigentes son cautos a la hora de sumar refuerzos, se conoció que los “gauchos” están cerca de concretar la incorporación de Héctor López. El “Arenero” desechó un ofrecimiento de Tristán Suárez y se mostró interesado en jugar en Bella Vista.
Abel Olmos, luego de jugar durante varias temporadas en San Jorge, regresó al club que lo vio nacer futbolísticamente. Allí se dará el gusto de volver a jugar junto a su hermano Gastón, quien fue uno de los artífices del subcampeonato Anual liguista logrado en la temporada 2013.
“Es una enorme satisfacción volver a jugar en mi querido club. En estos días que estoy trabajando con el plantel, me di cuenta que tomé la decisión correcta”, sostuvo Olmos, mientras recibía el cariño de los pibes que se llegaron al estadio para ver la práctica.
Abel y Gastón tendrán la chance de jugar con hinchada propia, porque toda su familia lo acompaña al equipo de Bella Vista a todos lados.
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