21 Agosto 2014
MERCADO INTERNO. Omodeo pide que se resuelva la inflación. la gaceta / foto de jorge o. sgrosso-archivo
Pedro César Omodeo, presidente de la Federación Económica de Tucumán (FET), afirmó que la decisión del Gobierno nacional de enviar un proyecto de ley que establece el pago de los bonos bajo legislaciones extranjeras en Buenos Aires y reemplazar al Banco de Nueva York (BONY) por Nación Fideicomisos S.A., es una medida de coyuntura. “Es política de coyuntura. Se van tomando medidas de corto plazo, acciones inmediatas. Pero no se puede ir tomando resoluciones que no tengan un análisis general”, dijo el dirigente empresarial.
El titular de la FET hizo referencia, en esa línea, a la modificación de la Ley de Abastecimiento, en entre otros regímenes comerciales. “No se determina cuál es la intencionalidad de la reforma, al contrario, lo que se hace es sembrar mayores dudas en el empresariado”, enfatizó.
Según Omodeo, la norma permitirá una expropiación lisa y llana de las empresas y atacará a la seguridad jurídica y la propiedad privada, no sólo referida a los bienes inmuebles, sino también a la economía y los procesos productivos. “Estamos en contra del monopolio y la concentración, pero se trata de una medida que abarcará a todos”, añadió.
“En definitiva, todas estas medidas generan dudas, intranquilidad e incertidumbre. Impactan negativamente en el sector productivo, en recesión, ya que no hay política de mediano y largo plazo. Generan mucho ruido que lleva a la falta de inversión; arrastran al empresario a postergar sus decisión, máximo en un periodo altamente”, manifestó luego. Omodeo situó su posición respecto de la decisión oficial de cambiar la sede de cobro, en un escenario marcado por el aumento del desempleo, altas tasas de interés, y pérdida de la capacidad de pago. “Se obstaculiza a la economía. Hay distracción y no se ataca a los problemas internos: inflación y falta de financiamiento”, finalizó.
El titular de la FET hizo referencia, en esa línea, a la modificación de la Ley de Abastecimiento, en entre otros regímenes comerciales. “No se determina cuál es la intencionalidad de la reforma, al contrario, lo que se hace es sembrar mayores dudas en el empresariado”, enfatizó.
Según Omodeo, la norma permitirá una expropiación lisa y llana de las empresas y atacará a la seguridad jurídica y la propiedad privada, no sólo referida a los bienes inmuebles, sino también a la economía y los procesos productivos. “Estamos en contra del monopolio y la concentración, pero se trata de una medida que abarcará a todos”, añadió.
“En definitiva, todas estas medidas generan dudas, intranquilidad e incertidumbre. Impactan negativamente en el sector productivo, en recesión, ya que no hay política de mediano y largo plazo. Generan mucho ruido que lleva a la falta de inversión; arrastran al empresario a postergar sus decisión, máximo en un periodo altamente”, manifestó luego. Omodeo situó su posición respecto de la decisión oficial de cambiar la sede de cobro, en un escenario marcado por el aumento del desempleo, altas tasas de interés, y pérdida de la capacidad de pago. “Se obstaculiza a la economía. Hay distracción y no se ataca a los problemas internos: inflación y falta de financiamiento”, finalizó.