Maru Botana pensó quitarse la vida por la muerte de su hijo

A seis años del episodio más doloroso, la cocinera dio detalles del tormento que vivió y cómo salió adelante. "No tenía fuerza de nada, ni de levantarme".

Maru Botana pensó quitarse la vida por la muerte de su hijo
09 Septiembre 2014
BUENOS AIRES.- Seis años después del episodio más doloroso de su vida, se animó a abrir su corazón y contar ante una cámara el tormento que vivió y cómo salió adelante. Maru Botana brindó una entrevista en el que habló sobre la pérdida de Facundo, el sexto de sus ocho hijos.

La cocinera fue entrevistada por Martín Seefeld en el programa "El Mundo nos mira", que conduce por el Canal de la Ciudad. Sin eufemismos, contó lo que significó el fallecimiento de su hijo, el 21 de septiembre de 2008, de muerte súbita y con sólo seis meses. "Pensé que se me arruinaba la vida, que nunca iba a salir, la sensación fue 'ya está flaca, andá, matate, tirate por la ventana'”, confesó Botana.

La muerte del pequeño se dio mientras la cocinera pasaba un fin de semana con su familia y el bebé estaba al cuidado de sus abuelos. Consultada sobre si en algún momento sintió culpa, Botana dijo que se sintió como atolondrada, sin entender por qué lo dejó.

Agustín, que tenía 9 años, me dijo '¿para qué lo dejaste?'. Pensé que mejor no tome frío, lo dejo con mamá... Luego te ubicás en otro lado y pensás que fue hasta mejor que ellos (sus hijos) no se quedaran con la imagen ahí de su hermanito muerto y que fuera en la casa de mamá. Tuve un montón de señales, pero es duro, durísimo. Gracias a Dios con el cariño de todos y de saber que tenía cinco hijos que tenía que remontar, pude mejorar. Pero no tenía fuerza de nada, ni de levantarme. Pero sentía que algo tenía que hacer”, relató entre lágrimas.

Botana dijo que cayó en cuenta del cariño que le tiene la gente en ese momento, en el más difícil de su vida. "Tenía un colchón de gente que me estaba apoyando. Me impresionó. Era como que no me podía caer, porque ellos estaban sosteniéndome. Cajones de cartas y cartas", contó.

"Cuando quedé de nuevo embarazada (de Juan Ignacio, su séptimo hijo), los chicos me preguntaban si podía volver a pasar. Les dije que puede, que yo no mandaba en eso, pero que lo íbamos a intentar. Y cuando quedé embarazada la segunda vez (de Inés, la octava), Luchi, que tiene 12 años, me preguntó cómo me había animado después de lo que me había pasado. Le dije que así era la vida, que había que seguir y no bajar los brazos”, expresó.

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