26 Septiembre 2014
El codefensor Augusto De Gregorio (retrato) sorprendió a todos ayer cuando rompió el silencio que había guardado religiosamente -durante las seis jornadas previas- para presentar el alegato en favor de Jorge Rigourd, Fernando Recalde y César Daniel Barboza, tres de los cuatro imputados vinculados a MA Valores SA Sociedad de Bolsa. El joven abogado, que actúa en el juicio junto al profesional César Merlo, dijo al Tribunal Oral en lo Criminal Federal que no quedaban dudas de que una parte de los títulos de la deuda pública cuestionados (U$S 620.000) habían sido adquiridos por Fátima Atim e Inés Yolanda Borquez, y que la primera también compró la porción restante -ingresó a la cuenta de Borquez después de la medida cautelar- en virtud del mandato que le había conferido el empresario Eduardo Domingo Molinari.
“¿Dónde está Molinari?”, interrogó el letrado. Y añadió: “la Justicia nunca investigó a este señor ni le imputó delito alguno aunque él intervino en la operación bursátil controvertida. En cambio, acusó a Rigourd, que era productor de MA Valores; al cajero Recalde y al cadete Barboza por desempeñar su actividad diaria y lícita”. De Gregorio manifestó que, en el afán de desentrañar el origen de los fondos (empleados para adquirir los bonos implicados en la causa “Borquez”), el Ministerio Público trajo a juicio oral a ciudadanos inocentes.
“¿Dónde está Molinari?”, interrogó el letrado. Y añadió: “la Justicia nunca investigó a este señor ni le imputó delito alguno aunque él intervino en la operación bursátil controvertida. En cambio, acusó a Rigourd, que era productor de MA Valores; al cajero Recalde y al cadete Barboza por desempeñar su actividad diaria y lícita”. De Gregorio manifestó que, en el afán de desentrañar el origen de los fondos (empleados para adquirir los bonos implicados en la causa “Borquez”), el Ministerio Público trajo a juicio oral a ciudadanos inocentes.
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