Por Carlos Werner
05 Enero 2015
Las intrigas dakarianas no son como las palaciegas, en las que a veces se esconde la tierra bajo la alfombra; aquí la hacen volar por el aire. Terranova y Al Attiyah vienen con mar picado por una cuestión de “actitudes” en una carrera en Marruecos. Allí, el qatarí anotó su primer punto en las tarjetas. El sábado marcó el segundo, al recibir una ovación del público en la largada oficial, contra sólo aplausos para el mendocino. Y ayer impuso un tercero, al vencerlo por 22” en la etapa inicial del Dakar 2015. Pero a “Orly” los comisarios deportivos le dieron impulso para un cross de escritorio, con la sanción dispuesta contra el asiático. Varios combates más están por venir, y quizás nuevos chispazos a la luz de un panorama con horizontes más dificultosos y (varios) otros actores que pueden aparecer. Cuestión de tiempo y oportunidades. Quien ya quedó out de estas chances es “Nani” Roma, campeón defensor que ¿inesperadamente? las dilapidó por sus problemas en el motor en su coche. El año pasado ganó envuelto en las nunca aclaradas dudas sobre si hubo orden de equipo. Esta vez, deberá acomodarse a un indigno rol de reparto.
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