Misterios en la tumba de Alejandro Magno

Identificaron los restos de una mujer, un bebé y dos varones. No se sabe si eran parientes

20 Enero 2015
Una extensa tumba antigua en que se pensaba que podría estar enterrado Alejandro Magno, en realidad contiene los huesos de una mujer, un recién nacido y dos hombres, así como partes de una cremación, publicó ayer el ministerio de Cultura de Grecia y reprodujo la agencia Reuters.

El misterio de que la sepultura de piedra caliza en la tumba de Anfípolis pudiera pertenecer al legendario Alejandro, a uno de sus generales o familiares, cautivó a los griegos en los últimos meses a medida que los arqueólogos continuaban encontrando elementos interesantes.

Anfípolis está considerada la tumba más extensa descubierta en Grecia y data de la época de Alejandro, aproximadamente de los años 325 al 300 antes de Cristo.

El legendario conquistador murió en Babilonia (Irak en la actualidad) en el 323 antes de Cristo tras una campaña militar por Oriente Medio hasta lo que es hoy en día Pakistán. No se conoce dónde fue enterrado pero los historiadores dicen que fue en la ciudad egipcia de Alejandría.

El Ministerio de Cultura dijo que la investigación de los huesos de la tumba mostró que la mujer sepultada tenía más de 60 años y medía 1,57 metro, mientras que los hombres tenían entre 35 y 45 años.

Uno de los hombres mostraba marcas de cortes en la parte izquierda del pecho que posiblemente eran heridas mortales causadas por un cuchillo o una espada pequeña, dijo el ministerio. Los hombres medían entre 1,61 y 1,68.

¿Eran parientes?
No se pudo definir el género de la quinta persona enterrada porque fue cremada. Pero se harán más pruebas.

También se llevarán a cabo más pruebas a los huesos de la mujer y los hombres para determinar si eran familiares.

“Parte del análisis buscará una posible relación sanguínea (...) pero la falta de dientes o partes del cráneo que son usadas en pruebas de ADN antiguo podría no permitir una identificación exitosa”, dijo el ministerio.

Las excavaciones en el lugar, que se ubica cerca de la segunda mayor ciudad griega de Tesalónica comenzaron en el 2012 y acapararon la atención global en agosto, cuando los arqueólogos anunciaron el descubrimiento de un extenso complejo funerario custodiado por dos esfinges y rodeado de un muro de mármol de 497 metros.

Desde entonces, en la tumba también se haló un mosaico de colores en el suelo que muestra el secuestro de Perséfone, la hija de Zeus, además de dos estatuas con formas femeninas conocidas como cariátides.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios