08 Febrero 2015
LA PRIORIDAD. El Gobierno de Tsipras quiere revertir la crisis social que padece el pueblo griego. reuters
ATENAS.- Grecia informó que no tiene problemas de liquidez a corto plazo y que entregará a sus socios de la Unión Europea un plan integral la próxima semana para gestionar la transición a un nuevo acuerdo sobre su deuda.
La UE ha advertido que el tiempo se está acabando para evitar una crisis de financiamiento de Grecia. El nuevo gobierno de izquierdas griego ha rechazado la austeridad a la que se vio obligada por un rescate del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea y, en su lugar, busca en cambio lograr un “acuerdo puente” hasta que se haya negociado un nuevo pacto.
“Vamos a presentar una propuesta integral el miércoles”, dijo el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, refiriéndose a una reunión de ministros de Finanzas de la zona euro que se realizará en Bruselas ese día.
Varoufakis asistió a una reunión de gabinete convocada para preparar un programa general del Gobierno, que el primer ministro Alexis Tsipras presentará hoy al Parlamento. Según fuentes gubernamentales, se cree que Tzipras podría anunciar que sus promesas de campaña no podrán ser cumplidas en el primer año y deberá hacerlo en dos fases, debido a los problemas que está enfrentando en la negociación con los europeos.
En la primera parte, se buscaría combatir la crisis humanitaria, uno de los pilares del denominado programa de Salónica que, entre otros aspectos, contempla ofrecer luz gratuita, vales de comida y bonos de transportes para los más excluidos.
El gobierno calcula que dicho plan costaría unos 2.000 millones de euros y sería financiado mediante una mejor lucha contra la evasión fiscal, una de las principales promesas de Syriza.
Una prórroga
El viernes, Jeroen Dijsselbloem, que preside el Eurogrupo, entidad formada por los ministros de Finanzas de la zona euro, afirmó a Reuters que Grecia tenía que solicitar una prórroga al plan de reformas de sus préstamos antes del 16 de este mes, para garantizar que continúa el respaldo económico de la zona euro.
En esencia se trata de una extensión del plan de rescate actual, el cual Grecia ha dicho que no aceptará. Grecia debe pagar 1.500 millones de euros en préstamos con el FMI en marzo, lo que plantea preocupaciones sobre una eventual crisis de liquidez. Sin embargo, esto fue descartado el sábado por el funcionario griego a cargo de las cuentas del Estado.
“Durante el período de tiempo de las negociaciones no hay ningún problema (de liquidez). Esto no significa que no habrá un problema después”, dijo el viceministro de Finanzas, Dimitris Mardas. Consultado sobre si el Estado puede sufrir una crisis de liquidez si las conversaciones se prolongan hasta mayo, el ministro dijo que no esperaba que las negociaciones sobre un nuevo acuerdo duraran tanto tiempo. “Incluso si sucediera, podemos encontrar el dinero”, indicó. (Reuters-Télam)
La UE ha advertido que el tiempo se está acabando para evitar una crisis de financiamiento de Grecia. El nuevo gobierno de izquierdas griego ha rechazado la austeridad a la que se vio obligada por un rescate del Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea y, en su lugar, busca en cambio lograr un “acuerdo puente” hasta que se haya negociado un nuevo pacto.
“Vamos a presentar una propuesta integral el miércoles”, dijo el ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, refiriéndose a una reunión de ministros de Finanzas de la zona euro que se realizará en Bruselas ese día.
Varoufakis asistió a una reunión de gabinete convocada para preparar un programa general del Gobierno, que el primer ministro Alexis Tsipras presentará hoy al Parlamento. Según fuentes gubernamentales, se cree que Tzipras podría anunciar que sus promesas de campaña no podrán ser cumplidas en el primer año y deberá hacerlo en dos fases, debido a los problemas que está enfrentando en la negociación con los europeos.
En la primera parte, se buscaría combatir la crisis humanitaria, uno de los pilares del denominado programa de Salónica que, entre otros aspectos, contempla ofrecer luz gratuita, vales de comida y bonos de transportes para los más excluidos.
El gobierno calcula que dicho plan costaría unos 2.000 millones de euros y sería financiado mediante una mejor lucha contra la evasión fiscal, una de las principales promesas de Syriza.
Una prórroga
El viernes, Jeroen Dijsselbloem, que preside el Eurogrupo, entidad formada por los ministros de Finanzas de la zona euro, afirmó a Reuters que Grecia tenía que solicitar una prórroga al plan de reformas de sus préstamos antes del 16 de este mes, para garantizar que continúa el respaldo económico de la zona euro.
En esencia se trata de una extensión del plan de rescate actual, el cual Grecia ha dicho que no aceptará. Grecia debe pagar 1.500 millones de euros en préstamos con el FMI en marzo, lo que plantea preocupaciones sobre una eventual crisis de liquidez. Sin embargo, esto fue descartado el sábado por el funcionario griego a cargo de las cuentas del Estado.
“Durante el período de tiempo de las negociaciones no hay ningún problema (de liquidez). Esto no significa que no habrá un problema después”, dijo el viceministro de Finanzas, Dimitris Mardas. Consultado sobre si el Estado puede sufrir una crisis de liquidez si las conversaciones se prolongan hasta mayo, el ministro dijo que no esperaba que las negociaciones sobre un nuevo acuerdo duraran tanto tiempo. “Incluso si sucediera, podemos encontrar el dinero”, indicó. (Reuters-Télam)