08 Abril 2015
REUTERS
SANTIAGO DE CHILE.- La cifra de desaparecidos tras el temporal que afectó el Norte chileno se elevó a 150, en tanto que los muertos suman 26, según el último relevamiento de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), que consigna que la catástrofe climática damnificó a 29.741 personas.
Mientras se iniciaron las tareas de reconstrucción de las viviendas, el Gobierno reveló que la región más golpeada es la de Atacama donde fallecieron 23 personas y 28.000 quedaron afectados. En la región de Antofagasta hay tres personas fallecidas y 1.452 damnificados y en Coquimbo, la situación de emergencia ya se superó, aunque quedan 289 damnificados. El devastador temporal que se desató en el Norte de Chile inundó de agua y lodo a gran cantidad de poblaciones próxima a la cordillera.
La presidenta Michelle Bachelet visitó dos veces la región de Atacama, desde donde aseguró que su gobierno va a “reconstruir” las zonas afectadas. Atacama fue azotada el 25 de marzo por 17 aluviones simultáneos que sepultaron pueblos enteros y destruyó gran parte de la infraestructura vial.
Toda la zona se mantiene bajo “estado de excepción constitucional de catástrofe” y con toque de queda nocturno, mientras se realizan labores de remoción de lodo con palas mecánicas y maquinarias pesada. (Télam-especial)
Mientras se iniciaron las tareas de reconstrucción de las viviendas, el Gobierno reveló que la región más golpeada es la de Atacama donde fallecieron 23 personas y 28.000 quedaron afectados. En la región de Antofagasta hay tres personas fallecidas y 1.452 damnificados y en Coquimbo, la situación de emergencia ya se superó, aunque quedan 289 damnificados. El devastador temporal que se desató en el Norte de Chile inundó de agua y lodo a gran cantidad de poblaciones próxima a la cordillera.
La presidenta Michelle Bachelet visitó dos veces la región de Atacama, desde donde aseguró que su gobierno va a “reconstruir” las zonas afectadas. Atacama fue azotada el 25 de marzo por 17 aluviones simultáneos que sepultaron pueblos enteros y destruyó gran parte de la infraestructura vial.
Toda la zona se mantiene bajo “estado de excepción constitucional de catástrofe” y con toque de queda nocturno, mientras se realizan labores de remoción de lodo con palas mecánicas y maquinarias pesada. (Télam-especial)