11 Abril 2015
El alto rendimiento por hectárea que se viene dando en la soja, no compensará la pérdida total de los ingresos debido a la baja en el precio del commoditie que hoy es superior al 30% en la relación anual.
Tanto los datos difundidos por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) como la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, coinciden en que, hasta ahora, la cosecha de soja muestra altos rendimientos que, en promedio, oscilan en torno de los 4,5 a 4,3 toneladas por hectárea. Y si bien el rango va de 3,9 a 5,5, para el final de la campaña los números marcarían un nuevo hito.
A partir de esto un trabajo, elaborado por la consultora Agripac señaló que “esa mejora sólo cubrirá una parte de los gastos destinados al cultivo, frente a la baja de los precios”. Según el análisis, en 2014, con una soja que se pagaba en el mercado a U$S 330 y un rendimiento de 4 tn, el productor ganaba por hectárea U$S 1.320. Si a esto se le restan los U$S 700 de gastos (sin contar los de estructura), le quedaban U$S 620.
Hoy, con los mismos gastos, pero con una soja mayo de U$S 220, y un rendimiento de 5 toneladas, la ganancia es de U$S 400. “Esto quiere decir que, al menos, los resultados muestran que se compensa el 50% de esa baja en los ingresos”, dijo el director de la consultora Pablo Adreani. Para el analista, en el ciclo anterior, en donde los rendimientos en algunos campos de la zona núcleo fueron bajos por la sequía , “en este 2015, el margen bruto es positivo; en pocas palabras hoy se gana plata”. Las 2 toneladas de hace un año, por la seca, versus las 3,5 actuales, muestran una diferencia negativa de U$S 40, contra los U$S 70 actuales.
Una menor pérdida se hubiera dado si el productor no especulaba con los precios. Precisamente, el lunes, en el recinto de la bolsa rosarina, 100.000 toneladas pasaron de mano a un valor de $ 1.930. Hace un mes el poroto cotizaba a $ 2.400, con lo cual el chacarero dejo de ganar $ 47 millones por esperar una suba. Este representó un retroceso del 20%.
Tanto los datos difundidos por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) como la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, coinciden en que, hasta ahora, la cosecha de soja muestra altos rendimientos que, en promedio, oscilan en torno de los 4,5 a 4,3 toneladas por hectárea. Y si bien el rango va de 3,9 a 5,5, para el final de la campaña los números marcarían un nuevo hito.
A partir de esto un trabajo, elaborado por la consultora Agripac señaló que “esa mejora sólo cubrirá una parte de los gastos destinados al cultivo, frente a la baja de los precios”. Según el análisis, en 2014, con una soja que se pagaba en el mercado a U$S 330 y un rendimiento de 4 tn, el productor ganaba por hectárea U$S 1.320. Si a esto se le restan los U$S 700 de gastos (sin contar los de estructura), le quedaban U$S 620.
Hoy, con los mismos gastos, pero con una soja mayo de U$S 220, y un rendimiento de 5 toneladas, la ganancia es de U$S 400. “Esto quiere decir que, al menos, los resultados muestran que se compensa el 50% de esa baja en los ingresos”, dijo el director de la consultora Pablo Adreani. Para el analista, en el ciclo anterior, en donde los rendimientos en algunos campos de la zona núcleo fueron bajos por la sequía , “en este 2015, el margen bruto es positivo; en pocas palabras hoy se gana plata”. Las 2 toneladas de hace un año, por la seca, versus las 3,5 actuales, muestran una diferencia negativa de U$S 40, contra los U$S 70 actuales.
Una menor pérdida se hubiera dado si el productor no especulaba con los precios. Precisamente, el lunes, en el recinto de la bolsa rosarina, 100.000 toneladas pasaron de mano a un valor de $ 1.930. Hace un mes el poroto cotizaba a $ 2.400, con lo cual el chacarero dejo de ganar $ 47 millones por esperar una suba. Este representó un retroceso del 20%.
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