27 Julio 2015
Hace 10 meses, cuando la Policía fue a buscar a un presunto abusador para detenerlo, no lo encontró en su domicilio. Esta semana, al revisar sus datos en el padrón electoral, advirtieron que figuraba una dirección diferente. Hasta allí se dirigió una comisión policial y logró atraparlo.
El joven tenía 18 años cuando lo denunciaron, el 14 de septiembre del año pasado. Una mujer de 33 años lo acusó de haber abusado sexualmente de su hija de cuatro, cuando el imputado estaba de visita en la casa de la víctima, ubicada en la comuna de Los Sueldos, departamento de Leales.
La denuncia ingresó a la Fiscalía de Instrucción de la X° Nominación, a cargo de Guillermo Herrera. Según precisó la madre de la víctima en su declaración, el día del hecho estaba en su casa junto a su hija y a su marido, quien había recibido a un amigo, y ambos se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas.
La mujer le dijo al fiscal que, alrededor de las 13, ingresó a su habitación y descubrió al amigo de su esposo junto a su pequeña hija. “Los dos estaban con los pantalones abajo”, precisó la mamá de la víctima, que en ese instante corrió a buscar a su marido. Sin embargo, cuando regresaron al dormitorio, ambos ya estaban vestidos.
El matrimonio levantó a la niña y se dirigió a la comisaría de Los Sueldos, donde alertaron a la Policía sobre la posibilidad de que la niña haya sido abusada sexualmente. Los uniformados dieron intervención a la Justicia y al día siguiente el juez de Instrucción de la I° Nominación, Javier Tomas, les ordenó que allanaran la vivienda del presunto abusador y lo detuvieran.
Con esa orden se dirigieron los policías a buscar al sospechoso, pero no lo encontraron. El supuesto abusador estuvo prófugo hasta la semana pasada, cuando intervino en su búsqueda personal del Departamento de Inteligencia Criminal de la Policía (D-2).
Cuando recibieron la causa, los uniformados del D-2 averiguaron los datos del sospechoso en el padrón electoral y encontraron un domicilio distinto. De acuerdo con esos datos, el prófugo debía encontrarse en una vivienda de Los Gutiérrez, en Alderetes.
Los oficiales Luis Sebastián Barrientos y Néstor Eduardo Pérez, junto a los suboficiales Oscar Juárez y Ricardo Flores, se dirigieron a ese domicilio. Allí fueron recibidos por una mujer, quien se presentó como la madre del supuesto abusador y les permitió ingresar para que detuvieran a su hijo.
El joven tenía 18 años cuando lo denunciaron, el 14 de septiembre del año pasado. Una mujer de 33 años lo acusó de haber abusado sexualmente de su hija de cuatro, cuando el imputado estaba de visita en la casa de la víctima, ubicada en la comuna de Los Sueldos, departamento de Leales.
La denuncia ingresó a la Fiscalía de Instrucción de la X° Nominación, a cargo de Guillermo Herrera. Según precisó la madre de la víctima en su declaración, el día del hecho estaba en su casa junto a su hija y a su marido, quien había recibido a un amigo, y ambos se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas.
La mujer le dijo al fiscal que, alrededor de las 13, ingresó a su habitación y descubrió al amigo de su esposo junto a su pequeña hija. “Los dos estaban con los pantalones abajo”, precisó la mamá de la víctima, que en ese instante corrió a buscar a su marido. Sin embargo, cuando regresaron al dormitorio, ambos ya estaban vestidos.
El matrimonio levantó a la niña y se dirigió a la comisaría de Los Sueldos, donde alertaron a la Policía sobre la posibilidad de que la niña haya sido abusada sexualmente. Los uniformados dieron intervención a la Justicia y al día siguiente el juez de Instrucción de la I° Nominación, Javier Tomas, les ordenó que allanaran la vivienda del presunto abusador y lo detuvieran.
Con esa orden se dirigieron los policías a buscar al sospechoso, pero no lo encontraron. El supuesto abusador estuvo prófugo hasta la semana pasada, cuando intervino en su búsqueda personal del Departamento de Inteligencia Criminal de la Policía (D-2).
Cuando recibieron la causa, los uniformados del D-2 averiguaron los datos del sospechoso en el padrón electoral y encontraron un domicilio distinto. De acuerdo con esos datos, el prófugo debía encontrarse en una vivienda de Los Gutiérrez, en Alderetes.
Los oficiales Luis Sebastián Barrientos y Néstor Eduardo Pérez, junto a los suboficiales Oscar Juárez y Ricardo Flores, se dirigieron a ese domicilio. Allí fueron recibidos por una mujer, quien se presentó como la madre del supuesto abusador y les permitió ingresar para que detuvieran a su hijo.
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