Urtubey: “si triunfa, el principal lastimado por el escándalo será Manzur”

BUENOS AIRES.- La crisis derivada de las elecciones del domingo pasado en Tucumán (signadas por los incidentes violentos como la quema de urnas, las denuncias de supuesto fraude por parte de la oposición, y la represión a una protesta de ciudadanos que el lunes reclamaban nuevos comicios), fue uno de los ejes de la entrevista que el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, concedió ayer al periodista Marcelo Longobardi, de Radio Mitre, de Buenos Aires. El mandatario habló sobre el impacto que esos hechos podrían tener en la elección presidencial de octubre.

- Hemos comentado el tema de sus declaraciones sobre las elecciones en Tucumán. Le pido que me dé su punto de vista respecto de semejante espectáculo.

- Es lamentable todo lo que ha sucedido, de la forma en que ha pasado, porque el pueblo tucumano expresó su voluntad de que Juan Manzur sea el gobernador y eso me parece que es inevitable, pero todo lo que pasó termina generando una mancha que lastima al sistema institucional. Porque creo que, varias cosas juntas: una, me parece que hay que empezar a discutir sistemas, nosotros lo hemos hecho en la Provincia de Salta, no digo que sea la panacea lo que tenemos acá, pero en definitiva sigue escuchando a la gente que requiere respuestas un poco más modernas frente a procesos electorales y demás. Y lo otro, obviamente, la violencia es repudiable desde todo punto de vista, y un lamentable hecho que se viene dando en la Argentina últimamente, en donde aquel que pierde no asume resultados electorales y el primer recurso es denunciar un supuesto fraude. Hasta hace no mucho, en la Argentina la primer noticia después de una elección era cuando alguien decía “perdí la elección” o “lo felicito al ganador”, no existe más en la Argentina eso, lamentablemente, y eso me parece que, los que somos dirigentes políticos tenemos una responsabilidad doble porque, en definitiva, detrás de nuestras declaraciones, de nuestras acciones, puede haber mucha gente que puede cometer errores y uno tiene que hacerse cargo.

- Y lamentablemente en caso de que sea cierto que Manzur haya ganado, uno de los afectados principales va a ser justamente Manzur.

- Correcto. Es que ese es el principal problema, porque en definitiva va a tener que remarla de abajo para trabajar una legitimación de origen muy fuerte, que de hecho, la tiene en los votos, pero que claramente, frente a todo este escándalo, el principal lastimado es el pueblo tucumano y quien ha elegido el pueblo tucumano.

- Ustedes, en Salta, tienen experiencia en voto un poco más moderno. ¿Verdad?

- Nosotros hemos implementado el sistema que luego en esta elección lo usó, exactamente al mismo, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que es el sistema de boleta única electrónica. ¿Qué prevé esto? Darle libertad al ciudadano para que vote de la forma que quiera votar, el ciudadano fabrica su propia boleta, porque escucho ahora que se está hablando del tema, hay mucho mito con esto. Nosotros no estamos trabajando el concepto del voto electrónico, lo que planteamos es boleta electrónica. El ciudadano imprime su boleta y dos cosas: se termina la intermediación, el ejército de fiscales, de la gente que reparte boletas, las boletas son las que están ahí y vos la imprimís, y aparte por el uso de la tecnología, a más tardar en una hora y media o dos horas de terminada la elección tenemos el 100% de los resultados. Entonces se termina la discusión. Pensemos qué hubiese pasado en la Ciudad de Buenos Aires con una diferencia tan corta entre Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau, si teníamos el viejo sistema tradicional, todavía estarían contando votos.

- Ayer (por el jueves) tuvimos una larga conversación con Sergio Massa que proponía algo que a mí me parece un desafío complejo pero estimulante: intentar modificar algo hasta octubre. Entiendo que el oficialismo ha planteado que no, pero estaría bueno intentarlo.

- Soy un férreo impulsor del sistema, pero dicho con total respeto, es una barbaridad, porque el proceso electoral ya está disparado, hay toda una serie de plazos procesales, de cosas que se están haciendo y esto requiere de un tiempo, a nosotros nos llevó seis años hacerlo. Está bien, no digo que lo hagamos en tanto tiempo, hagámoslo en menos, lo podemos hacer porque podemos validar de aprendizaje y error que hemos tenido nosotros. Pero hacerlo en medio del proceso electoral es prácticamente imposible, hay que modificar los códigos electorales, hay que armar todo el sistema de nuevo. Es técnicamente imposible hacerlo. Sí me parece que está muy bueno, pero la Argentina tiene una tradición histórica en cambiar las reglas de juego en medio de los procesos y me parece que eso no es bueno, y no nos ha hecho bien. Sí creo que está bueno que se asuma el compromiso de avanzar en eso, lo quise hacer en su momento cuando fui legislador nacional y no tuve éxito porque no había consenso, lo logré hacer en la Provincia, creo que lo de Buenos Aires ayuda y me parece que hay que avanzar en los próximos tiempos.

Estoy convencido, y lo hemos hablado mucho con Daniel Scioli, nuestro candidato presidencial, respecto de la posibilidad de avanzar en una reforma política, de modernizar sistemas, y creo que lo vamos a poder hacer. Creo que a esta discusión hay que darla en otro clima, bajando muchos cambios y yendo un poquito más tranquilo.