BUENOS AIRES.- Cuando River termine su participación en el Mundial de Clubes de Japón, Carlos Sánchez le pondrá punto final a su ciclo como futbolista de los "Millonarios", que comenzó en 2011 y tuvo un interregno en la temporada 2013/14 cuando fue a préstamo a Puebla, de México.
Precisamente enn tierra azteca continuará su carrera el uruguayo, tras firmar un contrato de tres años con Rayados de Monterrey, operación que tuvo sus bemoles y provocó un fuerte enojo del presidente de River, Rodolfo D'Onofrio, que días antes de la firma del precontrato de Sánchez con los mexicanos había asegurado que el volante seguiría en Núñez.
"Mi salida de River no fue la ideal, pero yo tenía que buscar lo mejor para mí y también para mi familia. La oportunidad que tenía enfrente no la podíamos dejar pasar, asegurar el futuro de mis hijos y de mi familia es lo que siempre uno busca", le contó el mediocampista a "Ovación", periódico deportivo de su país.
También confesó que su sueño es jugar en Europa, aunque reconoció que su edad es una traba para conseguirlo.
D'Onofrio, enterado del acuerdo con Monterrey, no tardó en expresar su bronca. "Por Sánchez tuvimos reuniones y lo estoy esperando al jugador, porque él acordó con nosotros. En base a los números, nos dijo que se quedaba. Me saludó emocionado, quiero que me diga en la cara que ese abrazo que me dio es mentira”, señaló fastidiado entonces ante la prensa. (Especial)