07 Junio 2016
HERIDO. El joven sufrió golpes internos y una herida en la cabeza.
El domingo a la madrugada, G.C. habría robado un automóvil con el que protagonizó un espectacular choque en avenida Roca y Ayacucho. Al momento de la colisión contra una camioneta iba a su lado un joven, L.H., que desde el hospital dijo a su familia que no tenía nada que ver con presunto robo. Por el momento, ambos se encuentran aprehendidos.
“El dueño del automóvil apareció desnudo y perdido -lo habrían drogado- en la avenida Alem a las 7 de la mañana. A esa hora ya se había consumado el robo y mi hijo estaba en el boliche en el que trabaja. El dueño del local es testigo. Más tarde salió de ahí con unos amigos, comieron un choripán, fueron a buscar las camperas que habían dejado en un departamento y se fueron a un bar de Bolívar y Alem. Como a las 8 llegó la chica que robó el auto y no estaba sola. Había hombres y mujeres con ella. Mi hijo conversó con la mujer y ella se ofreció a llevarlo a casa. En el camino decidieron ir al parque y ahí fue donde chocaron, como a las 9”, contó la madre de L.H. a LA GACETA. Su hijo está internado en el Hospital Padilla, en el shock room. No tiene fracturas pero sí golpes internos que le afectaron los pulmones y un gran corte en la cabeza.
Según las versiones de los testigos, su hijo se había bajado gritando que no tenía “nada que ver”. Para la familia, esto es imposible porque “estaba semiconsciente y no podía mover la pierna derecha”.
El hombre dueño del auto, de 30 años, también está internado en el Padilla. Recuperó la consciencia, pero no puede recordar qué pasó el sábado a la noche. Según sus amigos, se fue de un bar de la calle Miguel Lillo con G.C., la mujer que manejaba el coche cuando ocurrió el choque. Ella se encuentra internada en el Centro de Salud por una fractura que sufrió en la pierna.
“El dueño del automóvil apareció desnudo y perdido -lo habrían drogado- en la avenida Alem a las 7 de la mañana. A esa hora ya se había consumado el robo y mi hijo estaba en el boliche en el que trabaja. El dueño del local es testigo. Más tarde salió de ahí con unos amigos, comieron un choripán, fueron a buscar las camperas que habían dejado en un departamento y se fueron a un bar de Bolívar y Alem. Como a las 8 llegó la chica que robó el auto y no estaba sola. Había hombres y mujeres con ella. Mi hijo conversó con la mujer y ella se ofreció a llevarlo a casa. En el camino decidieron ir al parque y ahí fue donde chocaron, como a las 9”, contó la madre de L.H. a LA GACETA. Su hijo está internado en el Hospital Padilla, en el shock room. No tiene fracturas pero sí golpes internos que le afectaron los pulmones y un gran corte en la cabeza.
Según las versiones de los testigos, su hijo se había bajado gritando que no tenía “nada que ver”. Para la familia, esto es imposible porque “estaba semiconsciente y no podía mover la pierna derecha”.
El hombre dueño del auto, de 30 años, también está internado en el Padilla. Recuperó la consciencia, pero no puede recordar qué pasó el sábado a la noche. Según sus amigos, se fue de un bar de la calle Miguel Lillo con G.C., la mujer que manejaba el coche cuando ocurrió el choque. Ella se encuentra internada en el Centro de Salud por una fractura que sufrió en la pierna.
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