Cambios en Ganancias: el desafío del Gobierno será compensar el desplome de la recaudación

BUENOS AIRES.- El Gobierno envía hoy al Congreso su proyecto de actualización del Impuesto a las Ganancias, que comenzaría a regir desde 2017, en medio de la fuerte presión que activó la oposición para tratar sus propias iniciativas tendientes a subir el mínimo no imponible.

Si bien no se anticipó a cuánto se elevará el piso por el cual se comenzará a pagar el gravamen, trascendió que la suba del mínimo no imponible sería de entre 15 y 17% sobre los actuales valores alcanzados por el impuesto, que son los salarios a partir de 30.000 pesos netos (25.000 de bolsillo) para casados con hijos y de 22.600 netos (18.800 de bolsillo) para solteros. De esta forma, el mínimo no imponible por el cual se comenzaría a pagar Ganancias quedaría para salarios desde 35.000 pesos brutos en el caso de los casados y desde 26.000 para los solteros. También se espera que el proyecto, que comenzaría a regir desde el 1 de enero del año próximo, proponga una modificación en las escalas, que se mantienen inalterables desde hace 16 años, señala una nota de la agencia DyN.

El presidente Mauricio Macri tuvo varias idas y vueltas sobre este tema, ya que primero había prometido tratarlo en el Parlamento este año, luego hizo lo posible para postergarlo hasta el año próximo y ahora decidió enviarlo justo antes de que cierre 2016. Lo hizo en medio de la ofensiva de la oposición y como gesto a la CGT luego de la masiva marcha que la central obrera concretó la semana pasada junto a organizaciones sociales.

En el Congreso hay varios proyectos sobre Ganancias dando vueltas, entre ellos el del opositor Sergio Massa, quien lo presentó oficialmente ayer en una conferencia de prensa. La propuesta del líder del Frente Renovador elevaría el piso a 48.000 pesos de sueldo bruto para los trabajadores casados y a 34.000 pesos para los solteros. El oficialismo hará lo posible para que se apruebe su proyecto. Para eso, buscará un acuerdo con los gobernadores que también están muy pendientes de este tema, ya que no desean que la caída de la recaudación por Ganancias sea fuerte debido a que la Nación coparticipa este impuesto con las provincias.

Ayer, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, pidió dar una “discusión seria y razonable” sobre las modificaciones de Ganancias, que se iniciarán en el Parlamento, y sugirió que se ponderen las restricciones fiscales. La frágil situación fiscal de las cuentas públicas le impiden al Gobierno nacional reajustar pautas de Ganancias sin afectar la recaudación fiscal. De hecho, Prat-Gay había adelantado que, con los cambios en el impuesto que alcanza a los contribuyentes de la cuarta categoría, es decir a la amplia mayoría de los asalariados, se prevé una reducción de los ingresos fiscales que rondará los $ 27.000 millones.

Sobre este punto, el asesor tributario de la Unión Industrial de Tucumán (UIT), Federico Moreno, señaló que, efectivamente, al retocar el mínimo no imponible y las escalas, el fisco recaudará menos. “Es inevitable el costo fiscal”, explicó el especialista, consultado por LA GACETA. Según indicó, una parte de los recursos para estabilizar la reducción de la recaudación podría surgir del IVA, que grava el consumo. “Un trabajador, que hoy está alcanzado por el Impuesto a las Ganancias, y que con los cambios queda eximido, dispondrá de más dinero para gastar en el consumo de bienes y de servicios en la economía. Entonces, se incrementará la recaudación del IVA, al moverse el consumo. Para lo que falte por compensar, habrá que ver de qué modo lo consigue el Gobierno”, subrayó Moreno.

La iniciativa oficial sobre Ganancias, que el Gobierno intentará debatir el 14 de diciembre, recién podría convertirse en ley en febrero, en el Senado, ya que en diciembre la actividad terminará antes de la Navidad y en enero de 2017 está previsto el receso parlamentario. En relación a las demoras para avanzar con Ganancias, Moreno atribuyó esta situación al delicado escenario fiscal de las cuentas públicas. “La economía está en una situación de elevado déficit fiscal. Además, el Gobierno adoptó, este año, medidas impositivas para alentar las inversiones, como exenciones de Bienes Personales para contribuyentes que registren activos mediante el blanqueo de capitales. Todo esto también hizo caer la recaudación e incrementó el déficit fiscal. Por lo tanto, las definiciones sobre Ganancias pasaron para el año que viene”, remarcó. A este factor, también se suman las expectativas políticas que el Gobierno deposita en las elecciones de 2017. “El otro componente, vinculado con los plazos para establecer los cambios en Ganancias, es el político. Al tratarse de una medida que alcanzará a los trabajadores, puede tener un impacto electoral en la futura votación”, agregó Moreno.

El Gobierno pretende que los salarios más bajos que paguen Ganancias, desde 2017, ronden los $ 35.000 neto. En relación a este objetivo, el tributarista Luis Comba manifestó que es más importante determinar el límite a partir del cual los contribuyentes pueden pagar. “Esta es la discusión que debe darse. Porque ello puede no ser suficiente si el piso del que se parte era, y efectivamente lo era, bajo”, dijo a LA GACETA. Sobre el ajuste de las escalas, afirmó que es una necesidad. “Con el ‘achatamiento’ de escalas, la mayoría de los contribuyentes, por pequeños que sean, tributan en la máxima escala”, advirtió.

En qué consiste la iniciativa oficial

El proyecto del Gobierno prevé que el mínimo no imponible de Ganancias suba entre 15% y 17%, en paralelo a la inflación proyectada para 2017.

Según el borrador que trascendió, los salarios más bajos que pagarán Ganancias rondarán los $ 35.000 netos, para casados con dos hijos.

Las alícuotas más bajas pasarían de 9% a 4%. Ese cambio reduciría a la mitad la imposición sobre los salarios más bajos de la economía.

En tanto, las alícuotas más altas, que están en 35%, subirían al 40%, con una carga mayor sobre los ingresos altos del mercado laboral.

La idea del equipo económico del Gobierno es que el costo fiscal, sobre las cuentas públicas, no supere los $ 27.000 millones.

Al ser Ganancias un tributo coparticipable, el Ejecutivo negocia con gobernadores, quienes temen una caída en los fondos para financiarse.

Claves de la propuesta de la oposición

El diputado nacional, Sergio Massa, presentó un proyecto para cambiar Ganancias. El piso es de $ 48.000, para casados con hijos.

Para solteros, el piso que sugirió el Frente Renovador es de $ 34.000. Quienes ganen menos de estos dos montos no tributarán.

Los jubilados no pagarán más Ganancias, salvo aquellos que perciban haberes superiores a los $ 60.000 mensuales.

La iniciativa de Massa prevé, además, que las escalas y las alícuotas se actualicen de modo automático, mediante el respaldo de una ley.

La medida no tiene costo fiscal para el Gobierno. Pagarán sectores como las mineras, el juego y las actividades financieras.

Según el massismo, con su propuesta se volcarán $ 80 millones al consumo, con lo cual 1 punto del PBI volverá al mercado interno.