La economía aún busca un sendero de crecimiento sostenible

No ha sido un año fácil. Las correcciones fueron tan dolorosas para la sociedad que, de una u otra forma, ha impactado en la popularidad del propio Mauricio Macri. Sin embargo, desde el gobierno nacional sostienen que no había otro camino que el de las correcciones macroeconómicas de una economía que se caía a pedazos. Se eliminó el cepo, el país salió del default, la Argentina retornó al mercado de capitales y hasta hubo un margen para cumplir, parcialmente, las promesas de campaña: retenciones para el campo, suba del mínimo no imponible para los asalariados. Ambas, no obstante, siguen siendo medidas insuficientes, según los actores económicos. La economía todavía está buscando un sendero de crecimiento sostenible. En estos meses se ha avanzado mucho en el plano económico e institucional. Se están haciendo los deberes pero la inversión no reacciona. El desgaste político fue importante por el tema tarifas donde no se alcanzó un esquema políticamente viable, aunque la propuesta era lógica en el aspecto técnico, enumera Eduardo Luis Fracchia, investigador senior del departamento de Economía del IAE. El consumo está resentido por la caída del salario real mientras que la pobreza creció por el desempleo y por la inflación.

“Creceremos entre 2 y 3% en 2017, será una recuperación cíclica típica de un año electoral. La inflación cerrará cerca de 40% este año y seguramente en 2017 baje hasta un valor entre el 20 y 25%”, puntualiza el economista. A su criterio, se sobreestimó el triunfo sobre la inflación que en un contexto de expansión económica hubiese sido todavía mayor. “La corrección de precios relativos siempre pasa factura al incremento de precios. En este caso, fue el ajuste del tipo de cambio retrasado y las tarifas”, completa en su análisis.

Y continúa. “La represión tarifaria, típica del peronismo, fue muy exagerada y quizás deberíamos haber ido por un camino más gradual para sortearla. Faltó tantear más la sensibilidad de la población y realizar una mejor comunicación sobre el tema”, acota Fracchia.

Según el experto, el país está frente al desafío de recuperar la industria que sigue muy frágil. La actividad manufacturera terminará el año con una contracción importante, sostiene.

La situación sectorial en cuanto al nivel de actividad es heterogénea. La industria automotriz está en baja por el efecto Brasil. La construcción sigue muy deteriorada. El sector textil muy sensible frente a la apertura comercial y en principio sujeto a mayor protección desde el Ministerio de Producción. El agro con buenas perspectivas en la producción de carne y la cosecha fina. La cosecha total de la campaña 2016 se ubicaría en 120 millones de toneladas. “Por otra parte, estamos complicados en cuanto al abastecimiento de energía lo que es una limitante para el crecimiento industrial”, advierte.

Cómo cierra el período
Según el economista del IAE Business School de la Universidad Austral, los números del año eran los previsibles, con una recesión leve cercana al 2% y una alta inflación del orden del 40%. “Son números parecidos a los de 2014, año también de estanflación”, compara.

¿Qué es lo que puede suceder de cara al año electoral que se avecina? El experto contesta: “la clase política oficialista debe sostener la gestión con un “recreo” en 2017 respecto al modelo pro inversión dándole mayor prioridad al consumo. Es clave que haya gobernabilidad para poder seguir con esta estrategia gradualista”.

Con una macroeconomía recesiva, Macri puede perder las elecciones de 2017 si no corrige a tiempo. La respuesta empresarial con mayor inversión es acotada. Hay muchas fichas puestas en el blanqueo que puede ser importante pero es una condición necesaria, no suficiente para la reactivación, finaliza Fracchia.

"La materia pendiente es mejorar la rentabilidad" 

Después de 12 años de asimetrías económicas, el balance de la gestión del presidente, Mauricio Macri, es positivo por las expectativas que se generaron, analizó el titular de la Federación Económica de Tucumán (FET), Pedro Omodeo. “Corregir los desajustes de la economía lleva tiempo. El mundo de los negocios se mueve por las expectativas y, en este sentido, la nueva gestión ha tomado algunas decisiones acertadas para mejorar el clima”, observó el directivo. Sin embargo, advirtió que aún quedan puntos para modificar. “La materia pendiente es la mejora de la competitividad en la región. Y esto se basa en atraer inversiones. Para conseguirlo, las empresas deben ser rentables y la economía todavía no cumplió con este propósito”, analizó. Omodeo puso énfasis en la necesidad de reformar el esquema tributario local. “Si no se modifica esto, por más obras de infraestructura que se hagan las empresas no serán rentables”, sostuvo el titular de la FET.

"El clima para los negocios cambió en la Argentina"

Las economías regionales se favorecieron con el acomodamiento del tipo de cambio y el clima de negocios mejoró en estos doce meses de gestión, consideró el titular de la Asociación Tucumana del Citrus (ATC), Roberto Sánchez Loria. “Sin embargo, el dólar todavía está un poco atrasado, aunque no tanto como el año anterior”, añadió. La competitividad de las empresas, según manifestó Sánchez Loria, no está dada sólo por el tipo de cambio, sino también por las inversiones en infraestructura y por una política tributaria menos distorsiva. “Estos factores deben modificarse para que las empresas sean más rentables, y para que puedan invertir y generar empleo”, recalcó. Sánchez Loria también se refirió a las expectativas sobre la apertura de Estados Unidos para importar limones de Tucumán. “La agenda de trabajo con las autoridades del Gobierno norteamericano está concluida. Queda esperar la resolución oficial. La esperanza es se resuelva antes de que finalice la gestión actual de (Barack) Obama”, expresó.

Será vital que la economía no demore en repuntar

Las expectativas dominaron el escenario del primer año de gestión. Tras un primer semestre traumático, debido a las correcciones, desde el mismo gobierno se mencionó que el repunte se observaría en el segundo. Sin embargo, eso no se observó. Según el economista de Abeceb.com, Dante Sica, ese segundo semestre recién comenzará el mes que viene, con una estabilización más visible de la inflación y con una leve mejora en los indicadores socioeconómicos del país.                                                                                                                                  La gestión del presidente Mauricio Macri “está cambiando cuestiones de hace seis o siete años, cuando la administración anterior intervino sobre algunos sectores a los que favoreció, y otros a los que perjudicó”, remarcó el ex secretario de Industria de la Nación. De cara a lo que puede ser el año electoral que se avecina, Sica fue tajante en su apreciación. Será fundamental que la economía no tarde en repuntar y que, en definitiva, la inflación termine de ser domesticada, puntualiza. A su criterio, esto ayudará a descomprimir las tensiones económicas que aún existen en la ARgentina y a darle cierta previsibilidad al programa económico nacional, en un año de elecciones.

Una ley que les brinda más oportunidades a las PyME

La industria turística en la Argentina está constituida, casi en su totalidad, por Pequeñas y Medianas Empresas (PyME). En este año de gestión, el Gobierno nacional sancionó la Ley PyME, que incluye beneficios impositivos y créditos para el sector. Según Héctor Viñuales, titular de la Federación de Cámaras de Turismo (Fedecatur), la iniciativa es una oportunidad para las empresas, y subrayó algunas de las posibilidades que ofrece la norma, como el reintegro del IVA para visitantes extranjeros que se alojen en hoteles argentinos. También remarcó la decisión de permitir que los viajeros paguen, mediante el plan “Ahora 12”, todos los servicios turísticos nacionales, incluidos los hoteles de cuatro y cinco estrellas. “Las medidas ayudarán a reactivar al sector que, desde 2013, registró una caída de actividad”, analizó Viñuales. Sin embargo, advirtió que los costos laborales e impositivos siguen en niveles elevados y afectan la competitividad. “Este factor debe corregirse”, insistió.

El sinceramiento fiscal contribuirá a la expansión

El economista jefe de la Fundación FIEL, Daniel Artana, dijo que la caída de 3,7% en la actividad económica observada en septiembre “fue un poco peor de lo que se esperaba”, y estimó que el año próximo debería haber una recuperación a partir del sinceramiento fiscal y una mejor cosecha agrícola.
Artana mencionó que la economía argentina “entró en recesión a fin del año pasado”, que después continuó por la crisis en Brasil, la devaluación y el ajuste de tarifas. “Todo eso genera ruido”, indicó de cara a lo que fue este primer año de gestión del presidente Mauricio Macri.
Artana señaló que “la construcción, después de una caída muy fuerte, tocó fondo a mediados de año y a partir de ahí ha recuperado un poco”, donde está ayudando la obra pública y el blanqueo.
Según Artana, 2017 se presenta con tendencias expansivas como el blanqueo y una mejor cosecha, por lo que estimó que la economía “debería tener una recuperación el año próximo”. (Télam)