15 Diciembre 2016
LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los miembros de la Corte Suprema se reunieron hoy con los fiscales y se comprometieron a mejorar la seguridad en los tribunales penales, donde hace un mes atrás desconocidos robaron en la fiscalía que conduce Washignton Navarro Dávila. Este fue el segundo encuentro que se produjo entre las partes, ya que el anterior había terminado en un escándalo.
El ministro Fiscal Edmundo Jiménez también participó de la reunión. Al finalizar, dialogó con la prensa y afirmó que el objetivo es resguardar el edificio, aunque desestimó que vaya a ser posible hacerlo antes de fin de año.
La semana pasada, el presidente de la Corte, Antonio Gandur, se retiró molesto del encuentro y lo dio por finalizado cuando Navarro Dávila dijo que no sentía un acompañamiento por parte de la máxima autoridad del Poder Judicial. Al respecto, Jiménez indicó que la reunión de hoy se desarrolló en buen clima y que no se hizo mención al escandaloso episodio. "Tenemos que construir y solucionar problemas, no quedarnos con situaciones pasadas", indicó.
Además de Navarro Dávila, a la cita asistieron los fiscales Diego López Ávila, Mariana Rivadeneira, María del Carmen Reuter, Arnoldo Suasnábar y Adriana Reinoso Cuello.
El 15 de noviembre, desconocidos ingresaron a la fiscalía que conduce Navarro Dávila donde sustrajeron celulares, dinero y expediente que estaban secuestrados por distintas causas. El único cambio que se produjo en el edificio desde entonces fue un portón enorme que cubre la entrada trasera de esas oficinas. Adentro, ni siquiera los armarios violentados fueron reparados y los expedientes están guardados a puertas abiertas.
Algunos de los teléfonos se encontraron más tarde en la obra en construcción que hay detrás del edificio, pero todavía se desconoce cuántos eran. El fiscal que investiga el hecho, Arnoldo Suasnábar, dictó el secreto de sumario y no trascendieron novedades del caso.
El ministro Fiscal Edmundo Jiménez también participó de la reunión. Al finalizar, dialogó con la prensa y afirmó que el objetivo es resguardar el edificio, aunque desestimó que vaya a ser posible hacerlo antes de fin de año.
La semana pasada, el presidente de la Corte, Antonio Gandur, se retiró molesto del encuentro y lo dio por finalizado cuando Navarro Dávila dijo que no sentía un acompañamiento por parte de la máxima autoridad del Poder Judicial. Al respecto, Jiménez indicó que la reunión de hoy se desarrolló en buen clima y que no se hizo mención al escandaloso episodio. "Tenemos que construir y solucionar problemas, no quedarnos con situaciones pasadas", indicó.
Además de Navarro Dávila, a la cita asistieron los fiscales Diego López Ávila, Mariana Rivadeneira, María del Carmen Reuter, Arnoldo Suasnábar y Adriana Reinoso Cuello.
El 15 de noviembre, desconocidos ingresaron a la fiscalía que conduce Navarro Dávila donde sustrajeron celulares, dinero y expediente que estaban secuestrados por distintas causas. El único cambio que se produjo en el edificio desde entonces fue un portón enorme que cubre la entrada trasera de esas oficinas. Adentro, ni siquiera los armarios violentados fueron reparados y los expedientes están guardados a puertas abiertas.
Algunos de los teléfonos se encontraron más tarde en la obra en construcción que hay detrás del edificio, pero todavía se desconoce cuántos eran. El fiscal que investiga el hecho, Arnoldo Suasnábar, dictó el secreto de sumario y no trascendieron novedades del caso.
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