Nada empañará la alegría de Atlético

Una derrota mañana no opacaría jamás el espléndido año que vivió Atlético. “¿Ni siquiera una goleada catastrófica?”, preguntaría el abogado del diablo presente. Quizás la formularía porque casualmente, la última vez que el “Decano” visitó a Tigre perdió 5 a 0, jugando uno de los peores partidos de los últimos años. Aquel encuentro no modificó más que jugadores en el equipo y aunque se repita mañana, volverá a ser anecdótico. Detrás hay un 2016 para poner en un cuadro.

“Obviamente es un partido del calendario que hay que jugar, sobre todo porque es bueno terminar ganando pero va a ser un año inigualable pase lo que pase. Para el club y para mí también”, reconoció Nery Leyes.

Si bien el equipo llegará sólo a la mitad (un partido menos que la mitad, incluso) de la temporada 2016/17, viene de un torneo en el que terminó quinto de 30 equipos y en el que logró la clasificación a la Copa Libertadores 2017.

“Nunca imaginamos que podíamos terminar el año así”, agregó el volante. “Así”, significa tan bien que con un partido en juego, nada pondrá en peligro los pergaminos y el reconocimiento de un equipo que llevó hasta lo más alto de su historia al club.

Además, el “Decano” se encuentra séptimo en la tabla de los promedios por lo que hasta un empate sería un gran resultado. Por supuesto que todos piensan en ganar y finalizar el año de la misma maneracomo lo empezaron, pero no será extremadamente necesario.

La victoria 2 a 1 ante Racing de febrero, el primer partido oficial, anticipaba un año espectacular para en ese entonces el equipo de Juan Manuel Azconzábal y, ahora, de Pablo Lavallén.

“Por suerte en la etapa de transición supimos entender rápido la idea de Pablo y aparecieron los resultados”, dijo Leyes quien al parecer ahora tiene más compañía en el medio. “Nunca estuve tan solo pero ahora no soy tan protagonista. Me siento bien, sí hay más contención y ahora se lucen más mis compañeros”, reconoció el jugador.

Pero aun cuando hay mucho para festejar, el descanso será corto. Menos de dos semanas entre el día posterior al último partido y el primero de la pretemporada (3 de enero). “Si el cuerpo técnico decidió esas fechas tenemos que confiar y enfocarnos al volver y entrenarse todo”, dijo Leyes sobre el inicio de 2017. Pero aunque haya poco descanso del 2016, muchos serán los recuerdos.