José Cano: “el Gobierno nacional no discrimina a las provincias”

José Cano enumera una decena de localidades del norte profundo durante la hora que dura la entrevista. Habla de transporte, del narcotráfico, de energías renovables. El teléfono del director del Plan Belgrano -área nacional que gestiona y prioriza el desarrollo de las provincias del Norte Grande- no deja de vibrar un instante. Está más canoso que en 2015, cuando compitió con Juan Manzur por la gobernación. Se lo nota agotado. Habla, sin embargo, con el mismo ímpetu. Comienza con calma cuando se refiere a las tareas de gestión y, a medida que responde sobre asuntos políticos, levanta el volumen y la velocidad de su voz.

Cano está convencido de que el gobernador tiene un problema: José Alperovich. Advierte que el cambio “de paradigma” que se dio en la Rosada no penetró los muros del edificio de 25 de Mayo y San Martín. Afirma que no piensa en ser candidato este año, pero que quiere que Cambiemos sea gobierno en 2019 en la provincia.

-La obra pública será la vedette del año electoral y todos quieren ponerle nombre…

-Trato de no entrar en esa pelea. Critican que no hay obras, pero van a caminar el Boulevard 9 de Julio y el canal San Luis (Yerba Buena). Son obras nuestras. O hablan de la obra del Aeropuerto: en los últimos años hubo $ 700 millones para sacarlos en valijas del banco y ¿no hubo $ 90 millones para una obra tan trascendente? El oficialismo provincial no tiene una mirada de mediano ni largo plazo de hacia dónde tiene que ir Tucumán en el marco de la región. El plan Belgrano y la mirada estratégica para la región son el futuro. Es irracional, por ejemplo, pensar que resolveremos el narcotráfico sólo desde aquí ¿Por qué no cayeron antes Trayán, el Gordo Vaca y todos esos personajes asesores del Poder Legislativo y punteros del oficialismo? Cayeron porque hubo un antes y un después. Cuando las fuerzas de seguridad ven que hay una decisión, actúan. Cuando ven que el poder político encubre y los delincuentes forman parte del poder político, no. Lo que se está haciendo en lucha contra el narcotráfico es importante.

-¿Encuentra trabas al trabajar con los gobernadores peronistas?

-Tenemos una definición de la región que llevó un año y medio de estudio. Tenemos mucha afinidad con algunos gobernadores, con otros, como el de Formosa, no pudimos articular. Hay mucha mezquindad. La primera reunión que tuve cuando asumí fue con Manzur. Nos dieron carpetas que decían ideas. En algunos casos, escritas a mano. Visitamos dependencias provinciales y el titular de la SAT, con quien tuvimos diferencias, nos dio proyectos en condiciones. En Tucumán en muchos casos faltan proyectos que estén en condiciones. Se usa el Fondo Soja para pagar sueldos y eso es malversar fondos. En otras provincias compraron maquinas para pavimentar con ese dinero.

- La Provincia dice que se da más a provincias de Cambiemos

-El Gobierno nacional no discrimina. Se firman convenios y los recursos llegan. Es inaudito que el gobernador siga con el régimen alperovichista. Tenemos la convicción de que el que maneja la agenda política-institucional es Alperovich. Abrazando a los pobres y entregando heladeras después de 12 años... ¡Es obsceno! La calidad de vida en los barrios que recorre debería haber mejorado. Va como ministro ad hoc para usar los bienes del Estado. Un escándalo. Esa es la concepción política que tienen: creen que la perpetuidad en el poder es la razón de la política.

-¿Cree que Manzur tiene un doble discurso con la Nación?

-Manzur tiene un problema: el gobernador itinerante es Alperovich. Son como un matrimonio con desavenencias que está viendo en que momento van a aprovechar para quedarse con la casa y los hijos. Aparece en escena Jaldo, el hijo que está saliendo de la adolescencia, que no sabe con quién se va a encolumnar y que por ahí tiene deseos de emanciparse. Las peleas del oficialismo no nos incumben, pero nos preocupa que en eso se va la discusión de la política. Manzur debería tener una agenda política y manejarla. No que Alperovich convoque a un empresario, al gabinete y al gobernador y al vice a su casa y los abrace y les diga aquí están ustedes. Es triste.

-¿Será candidato?

-El principal desafío que tengo es respetar la palabra empeñada, que es que el Plan Belgrano funcione y mi energía está puesta ahí. Como referente de Cambiemos, estamos en un proceso de consolidación del espacio en Tucumán. Uno es hombre de un proyecto político y cuando tuve que poner la cara y ser candidato, lo hice. Si de algo me siento satisfecho es del esfuerzo que hicimos. En 2007 sacamos el 3%. Hoy en nuestro espacio hay intendentes, legisladores, concejales y diputados. Se consolidó un espacio que tiene alternativas.

-Si el Presidente se lo pide, le dolería dejar el Plan Belgrano

-Sí. Estamos en una etapa de consolidación de proyectos. Tenemos muchos.

-¿Será candidato a gobernador?

-Dejaremos todo para ser gobierno. Estamos convencidos de que el estado no puede ser patrimonio de una familia. No puede ser garante de impunidad ni amparar para que la Justicia no dé respuestas sobre el crimen de Paulina. El poder político protege a los fiscales que no actúan con apego a la ley. Lamentablemente, Edmundo Jiménez consolida ese vínculo entre el poder político y el Judicial. No puede ser que se chicanee a la Justicia cuando le está pidiendo a un Poder que diga en qué se gastaron $600 millones. La causa Teves es escandalosa, armada para quedarse con recursos de privados. Hay una matriz que me preocupa, cosas que no cambiaron en la política. Está faltando una mirada que trascienda una elección. Se está cambiando la matriz en la Nación para construir políticas y diálogo, eso falta aquí. Me parece que nuestro desafío es dar una alternativa a los tucumanos. Vamos a dejar la vida en eso.