01 Marzo 2017
POR AHORA SÓLO DIRIGE A LOS JUGADORES. Lavallén da indicaciones a sus dirigidos en el entrenamiento de Atlético. El técnico está contento por lo que genera el público en su equipo y en el rival. la gaceta / foto de Antonio Ferroni
“Atlético es casi invencible cuando juega de local”. Las palabras llegaron desde Puerto La Cruz, al norte de Venezuela. ¿Hasta allí llegaron las noticias de la fortaleza en la que se ha transformado el “José Fierro”? No sería extraño dado que el alcance del equipo ha dejado de ser solo nacional, con su participación en la Libertadores, eliminando a equipos de Ecuador, Colombia y por enfrentar a otros de Bolivia, Brasil y Uruguay. Sin embargo, éste no es el caso, precisamente.
La frase la dijo Juan Manuel Azconzábal, en la previa del partido que su nuevo equipo, Huracán, tendrá hoy ante Deportivo Anzoátegui por la primera fase de la Copa Sudamericana.
El ex entrenador “decano” se hizo eco de lo que su sucesor y sus ex dirigidos consiguieron al ingresar a la fase de grupos del torneo más importante del continente a nivel clubes.
El “Vasco” sabe de lo que habla: desde que llegó a Atlético, tardó 32 partidos (aproximadamente dos años) en perder un partido en el Monumental y bajo su mando, el estadio volvió a convertirse en un terreno inexpugnable.
“El apoyo de la gente siempre es fundamental. Influye mucho en los partidos que jugamos aquí”, aseguró Cristian Lucchetti que, curiosamente, en la atajada final del partido ante Junior, contuvo el grito de los 30.000 hinchas en el corazón.
Al apoyo constante y la presión para el adversario en los 90 minutos de juego, le agregaron condimentos especiales que llamaron la atención de todos: desde aquel festejo especial con las 100 pelotas cayendo desde la tribuna por la igual cantidad de goles que alcanzó Luis Rodríguez, hasta extravagantes recibimientos al equipo como el que ejecutaron ante los colombianos.
Y mientras los hinchas fueron agudizando el ingenio, Lavallén y su cuerpo técnico tomaron la posta de Azconzábal de la mejor manera. Desde su llegada, el equipo disputó tres partidos en el Monumental con dos victorias y un empate.
“Agradezco a la gente por el apoyo, fue emocionante”, dijo Lavallén tras ver las muestras de pasión que entregaron los fanáticos no solo de local, sino también cuando viajaron al exterior.
En las próximas semanas, esa fortaleza como local se verá nuevamente testeada: si es que el fútbol vuelve este fin de semana, el “Decano” tendrá tres partidos seguidos en casa: el sábado a las 21.20 ante Sarmiento de Junín, el miércoles 8 de marzo ante Palmeiras, a las 21.45 y días después, el siguiente fin de semana, ante Aldosivi de Mar del Plata.
“El apoyo de la gente siempre fue importante. Ellos lo vienen demostrando hace rato”, admitió José Méndez, uno de los hombres de la rotación “decana”. El mendocino, incluso, podría ver más minutos de lo usual ya que el cansancio empezará a jugar un factor importante en los habituales titulares.
Para el duelo ante los brasileños, el primero de la fase de grupos para el equipo de Lavallén, distintas organizaciones de hinchas ya empezaron a convocar al público a seguir con los recibimientos llamativos.
“Queremos seguir siendo noticia y orgullo por la fiesta en cada partido”, reza un mensaje de la Comisión de Hinchas “Somos Tucumán”, que pide colaboración a los fanáticos para desplegar su inventiva a la hora de recibir a su equipo.
Nada en lo que tenga que detenerse Lavallén y compañía, pero como ellos mismos ya lo expresaron, no les es indiferente: el público de Atlético juega su partido. Los rivales lo sienten y la prensa toma nota.
La frase la dijo Juan Manuel Azconzábal, en la previa del partido que su nuevo equipo, Huracán, tendrá hoy ante Deportivo Anzoátegui por la primera fase de la Copa Sudamericana.
El ex entrenador “decano” se hizo eco de lo que su sucesor y sus ex dirigidos consiguieron al ingresar a la fase de grupos del torneo más importante del continente a nivel clubes.
El “Vasco” sabe de lo que habla: desde que llegó a Atlético, tardó 32 partidos (aproximadamente dos años) en perder un partido en el Monumental y bajo su mando, el estadio volvió a convertirse en un terreno inexpugnable.
“El apoyo de la gente siempre es fundamental. Influye mucho en los partidos que jugamos aquí”, aseguró Cristian Lucchetti que, curiosamente, en la atajada final del partido ante Junior, contuvo el grito de los 30.000 hinchas en el corazón.
Al apoyo constante y la presión para el adversario en los 90 minutos de juego, le agregaron condimentos especiales que llamaron la atención de todos: desde aquel festejo especial con las 100 pelotas cayendo desde la tribuna por la igual cantidad de goles que alcanzó Luis Rodríguez, hasta extravagantes recibimientos al equipo como el que ejecutaron ante los colombianos.
Y mientras los hinchas fueron agudizando el ingenio, Lavallén y su cuerpo técnico tomaron la posta de Azconzábal de la mejor manera. Desde su llegada, el equipo disputó tres partidos en el Monumental con dos victorias y un empate.
“Agradezco a la gente por el apoyo, fue emocionante”, dijo Lavallén tras ver las muestras de pasión que entregaron los fanáticos no solo de local, sino también cuando viajaron al exterior.
En las próximas semanas, esa fortaleza como local se verá nuevamente testeada: si es que el fútbol vuelve este fin de semana, el “Decano” tendrá tres partidos seguidos en casa: el sábado a las 21.20 ante Sarmiento de Junín, el miércoles 8 de marzo ante Palmeiras, a las 21.45 y días después, el siguiente fin de semana, ante Aldosivi de Mar del Plata.
“El apoyo de la gente siempre fue importante. Ellos lo vienen demostrando hace rato”, admitió José Méndez, uno de los hombres de la rotación “decana”. El mendocino, incluso, podría ver más minutos de lo usual ya que el cansancio empezará a jugar un factor importante en los habituales titulares.
Para el duelo ante los brasileños, el primero de la fase de grupos para el equipo de Lavallén, distintas organizaciones de hinchas ya empezaron a convocar al público a seguir con los recibimientos llamativos.
“Queremos seguir siendo noticia y orgullo por la fiesta en cada partido”, reza un mensaje de la Comisión de Hinchas “Somos Tucumán”, que pide colaboración a los fanáticos para desplegar su inventiva a la hora de recibir a su equipo.
Nada en lo que tenga que detenerse Lavallén y compañía, pero como ellos mismos ya lo expresaron, no les es indiferente: el público de Atlético juega su partido. Los rivales lo sienten y la prensa toma nota.
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