La nueva CGT marchó, pero se retiró abucheada

El acto en Buenos Aires terminó con incidentes y corridas; la cúpula de la central obrera finalmente no definió la fecha del paro general.

EN BUENOS AIRES. Cientos de miles de manifestantes marcharon y exigieron que se defina una fecha para el primer paro nacional contra el Gobierno. Dyn EN BUENOS AIRES. Cientos de miles de manifestantes marcharon y exigieron que se defina una fecha para el primer paro nacional contra el Gobierno. Dyn
08 Marzo 2017

BUENOS AIRES.- La primera manifestación masiva del sindicalismo en contra del presidente, Mauricio Macri, acabó en un bochorno. Los manifestantes echaron a los dirigentes gremiales del palco luego de que los sindicalistas evitaran fijar una fecha para el paro general con el que hace meses amenaza la conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT).

“Po-né-la fe-cha la p... que te parió”. “Paro General”. “Traidores”. Esas tres consignas fueron las más escuchadas durante los discursos de los tres titulares de la CGT. Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña, quedaron momentáneamente atrapados en el palco desde donde se anunció en forma tibia la convocatoria a un paro nacional para fines de marzo o principios de abril, ante la indignación de varios gremios que se movilizaron contra la política económica del macrismo.

El centenar de militantes que reclamaba a la CGT que se establezca una fecha a la huelga, muchos con pecheras de organizaciones kirchneristas, terminó por coronar una manifestación con saldo negativo para la dirigencia sindical.

Los dirigentes del triunvirato de la CGT definieron arrancar el acto una hora antes de lo previsto. Las columnas de manifestantes aún se estaban acomodando en las calles laterales a la esquina de Moreno y diagonal Julio Argentino Roca, donde se instaló el escenario, en pleno centro porteño.

El furcio de Daer durante su discurso tensó el clima: “ya está decidido que, si no hay rectificaciones a las políticas del Gobierno, vamos a hacer una medida de fuerza antes de fin de año”, dijo. Rápido de reflejos, se corrigió: “antes de fin de mes”. Una mujer desde el costado derecho del palco le reclamó, “poné la fecha, poné la fecha”. “La fecha está puesta compañera”, balbuceó el diputado nacional.

Para esa instancia, una amplia columna -en su mayoría de choferes de la agrupación Interlíneas, una organización que compite por la conducción de la UTA (Unión Tranviarios Automotor)-, cercó la salida de la dirigencia de la CGT.

La situación se descontroló. Desde la vereda que da al edificio de la Secretaría de Comercio, un manifestante comenzó a gritarle a Pablo Moyano “cagones”. El dirigente camionero salió a responderle con varios insultos y hasta quiso saltar del escenario para enfrentarlo.

Daer ya había recorrido los casi treinta metros que separaban el palco del garaje del edificio del sindicato de Comercio, mientras Acuña retrocedía escoltado.

Ante la consulta de DyN por la falta de confirmación de la fecha de la huelga, Acuña confesó que “no todos están de acuerdo con el paro” y aseguró que en la semana habrá una reunión del consejo directivo de la central obrera para tomar una decisión.

Un grupo del gremio de Camioneros retiró con violencia el vallado, corriendo a un grupo de los manifestantes. El incidente fue aprovechado para facilitar la fuga de Moyano, también fuertemente custodiado.

“Esto fue un escrache”, se atrevió a resumir uno de los empleados de seguridad de la CGT, mientras Schmid seguía arriba del escenario tratando de calmar los ánimos de los pocos militantes que se habían quedado.

“¿Por que no anunciaron la fecha del paro?”, le inquirió al moyanista una mujer, a lo que Schmid desde el borde del palco contestó: “lo hemos anunciado muchachos, es en este mes, este mes vamos a hacer el paro”.

Consultado por supuestas diferencias internas en la central sindical para definir la medida de fuerza, Schmid respondió: “en la CGT siempre hubo diferencias de opiniones pero mayoritariamente estamos dispuestos a ir al paro. Lo que pasa es que tenemos que organizar la fecha”.

Schmid pudo salir por un costado del palco hacia, pese a la presión de un grupo opositor. Ya sin dirigentes en el escenario, los choferes de Interlíneas, junto a otros activistas (algunos con camisetas identificadas con el kirchnerismo), coparon el escenario al grito de “poné la fecha...”.

Acuña y Daer permanecieron dos horas refugiados en el edificio del sindicato de los mercantiles y se retiraron en medio de insultos. (DyN-Especial)

"Generaron violencia de un acto legítimo"

La jefa de los senadores del PRO consideró como “preocupantes” los incidentes del final de la marcha encabezada por la CGT.

“Militantes de grupos de izquierda se han adueñado del acto y tomaron un reclamo legítimo para generar una situación de conflicto y violencia”, consideró la jefa de los senadores del PRO, Laura Rodríguez Machado.

La senadora cordobesa explicó que, aunque no se haya confirmado una fecha, no se diluyó la posibilidad de convocar a un paro general. “La CGT tiene que tomar conciencia de que cuando llaman a movilizar se pueden generar este tipo de fragmentaciones; hay que cuidar al trabajador cuando se lo convoca y no someterlo a este tipo de episodios que tienen que ver más con la ideología que con un reclamo por mejoras laborales”, declaró luego de la manifestación. (Télam)

Los miembros del gabinete presidencial rechazaron la manifestación sindical contra el gobierno de Mauricio Macri.

El jefe de Gabinete, Marcos Peña, criticó la convocatoria desde su cuenta de Twitter: “muchos dirigentes gremiales no están siendo lo más francos posibles sobre el rumbo económico del país”, y consideró que “la política electoral se está mezclando con la agenda de trabajo”.

Durante la mañana, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, afirmó que la movilización de la CGT respondía a fines políticos. “No tiene que ver con la cuestión de los despidos, que puede haber ocurrido en sectores particulares, acá corre un año electoral y el peronismo busca la identidad detrás de la defensa de los derechos de los trabajadores. La situación económica no se encuentra en crisis”, indicó funcionario. (Télam)

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