Desde abril, el gas para usuarios residenciales subirá hasta el 400%

El reajuste se aplicará en las facturas que superen los $ 250, según anunció Aranguren

EN LA AUDIENCIA. Aranguren dijo que no subsidiarán a la oferta de gas. Dyn EN LA AUDIENCIA. Aranguren dijo que no subsidiarán a la oferta de gas. Dyn
11 Marzo 2017
BUENOS AIRES.- El ministro de Energía, Juan José Aranguren, anunció ayer que las facturas de gas que superen los $ 250 finales tendrán un tope de aumento del 300 al 400% para los usuarios residenciales y del 500% para las PyME, respecto de los niveles vigentes al mismo mes de 2016.

Al disertar en la Audiencia Pública que se desarrolló en el Teatro de la Ribera, en el barrio porteño de La Boca, Aranguren también anunció una reducción del 5% a los subsidios que se aplican sobre la producción de gas natural, que representa aproximadamente un 40% del valor de la factura que reciben los usuarios residenciales, por lo que el costo pasará de U$S 3,42 a U$S 3,77 el millón de BTU (unidad térmica).

“Se ha dispuesto en todas las facturas que superen $ 250, con impuestos; la nueva (que regirá desde el mes que viene) nunca puede superar entre 300 a 500% respecto del mismo período del año anterior”, dependiendo de cada categoría, indicó.

El ministro sostuvo que el objetivo del Gobierno nacional es lograr “una reducción gradual y previsible de los subsidios a la producción y la importación de gas natural”, para “no sólo recuperar en tarifa el costo económico de la producción, sino ir reduciéndolo”.

El titular de la cartera de Energía precisó que “el 60% de los argentinos tiene acceso a la red de gas natural”. “Hoy se está subsidiando el 50% del consumo en general, mientras que en el caso de la Patagonia alcanza al 81%”, puntualizó.

Aranguren dijo que quieren un suministro sostenible en el tiempo, promoviendo la producción local. “Buscamos minimizar las importaciones, subsidiar a la demanda y no a la oferta, con un sistema equitativo y federal y fomentar el ahorro y consumo eficiente”, expresó el ministro.

Añadió que persiguen una reducción gradual y previsible del subsidio energético, “protegiendo a los más vulnerables con la tarifa social”.

“Durante 2016, el 26% del suministro se lo llevó la industria pagando U$S 4,17; el 38% las usinas, pagando U$S 5,20; el 6% el GNC, el 24% el sector residencial, el 3% el comercial y el 2% la tarifa social”, puntualizó.

También destacó que durante el año pasado, el Estado Nacional pago subsidios por U$S 2.690 millones “producto de la diferencia entre lo que cobró la oferta (U$S 5,22 el millón de BTU) y lo que pagó la demanda (U$S 3,97).

Tras señalar que están cubriendo el 50% del consumo con subsidios, Aranguren contó que los precios que se pagaron el año pasado por la importación de gas fueron de U$S 7,09 el millón de BTU proveniente de Chile; U$S 3,56 el de Bolivia y 11,20 el gas oil que se utiliza en invierno para garantizar el suministro. (DyN)

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios