Molina vuelve a ser titular después de más de un año

CON SU AMIGA. Molina despunta el vicio del fútbol-tenis con sus compañeros de Atlético, mientras espera sin prisa pero con ansias volver a ser titular en el Monumental. la gaceta / foto de antonio ferroni CON SU AMIGA. Molina despunta el vicio del fútbol-tenis con sus compañeros de Atlético, mientras espera sin prisa pero con ansias volver a ser titular en el Monumental. la gaceta / foto de antonio ferroni
31 Marzo 2017
En el “Jardín”, la humedad suele ser ese amigo pegajoso que no conoce de temporadas para demostrar su amor: constantemente está presente. Lo curioso es que mientras la mayoría se queja de la combinación letal entre temperatura y presión atmosférica del otoño tucumano, unos pocos sonríen y le hacen vista gorda al asunto. Uno de ellos es Emanuel Molina, el “Mago” que volvió a usar su varita mágica un rato largo en el 2-2 del domingo pasado en cancha de Temperley, y que hoy volverá a ser titular en Atlético después de poco más de un año y casi dos meses.

El cordobés volverá a dar una función completa luego de su lesión de ligamentos cruzados de la rodilla izquierda sufrida ante Racing, justo en lo que fuera el día más feliz de la mayoría del pueblo albiceleste, menos para él, por supuesto. Esa tarde noche del 7 de febrero de 2016 Atlético volvía a jugar en la máxima categoría y lo hacía con un 2-1. Esa misma tarde noche, en una jugada desafortunada, Molina chocó con Federico Vismara, y no se levantó más.

Pasó el tiempo, muchísimo para su gusto, y recién pudo volver a volar. La Reserva fue su nicho, Primera su anhelo, más aún sabiendo lo importante que había sido en el ascenso a la máxima categoría, y lo que representaba su fútbol entre los fans del “Decano”.

Molina, el “Mago”, está entero y contento. “Me estoy sintiendo cada vez mejor. Es más, podría decir que ya hace bastante tiempo estoy así, pleno. Sumar minutos en cancha me hace sentir importante”, confiesa el estratega, mirando lo bien que entró ante el “Gasolero”, pese a que el resultado no fue el esperado.

Regresar de un lesión tan larga y no sentir el temor de volver a sufrirla es casi un karma. Un karma que Molina afirma no sentir. “No, no, nada. Trato no de pensar en eso antes de los partidos. Y cuando jugué, no me acordé tampoco”, se resiste a ser consumido por el temor de la vieja herida.

En lo personal, moverse como se movió ante Temperley, fue una grata alegría. “Me sentí más suelto, me sentí importante en los minutos que me tocó estar. Eso fue lo bueno”, reconoce, al tiempo que grafica que el ritmo de competencia se gana en los partidos de verdad, porque los de la semana, por más que sean a matar a morir. siguen siendo de entrecasa, de entrenamiento entre compañeros.

“No hay comparación. Por ahí hablaba con amigos y les decía que necesitaba jugar, jugar enserio, ¿no? Porque uno puede matarse entrenando, jugar en Reserva, pero no es lo mismo a lo que se vive durante un partido oficial. Es otro el ritmo, es otra la presión. Son cosas diferentes que sólo se viven y sienten en un partido real”, confiesa a quien el hincha le tomó un cariño que excede lo mundano. El fútbol de Molina marcó un estilo en Atlético. “Ja, no sé si es tan así. Sí soy consciente de que la gente se portó muy bien conmigo; 10 puntos. Le voy a estar agradecido siempre”, aplaude.

Desesperado no está. No. Pero sí reconoce estar ansioso por volver en todo su esplendor. Y eso requiero su tiempo, su momento. Volver a ganar un lugar entre los 11 elegidos por el entrenador. “Trato de pensar en mejorar día a día y después meterlo al técnico en el problema de decidir quién es el que tiene que jugar. Soy consciente de que hay compañeros que están pasando un buen momento y me pone contento por ellos, pero espero poder ganarme un lugar porque lo que quiero es jugar y estar entre los 11 titulares también”, explica Molina, a horas de volver a pisar el escenario donde supo desplegar un repertorio pleno de magia e iluminismo: el Monumental.

La estrategia se resolvió en la sesión a puertas cerradas

Al igual que el miércoles, la práctica de ayer en el complejo de Ojo de Agua fue a puertas cerradas. El cuerpo técnico lo dispuso así porque buscó clausurar la estrategia que tiene pensada utilizar para recibir hoy a Gimnasia y Esgrima La Plata. Los ejercicios de pelota parada, tanto en ataque como defensa, se llevaron la mayor cantidad del tiempo de preparación de la jornada.

Después de la práctica hubo que seguir trabajando

Hubo trabajo especial para los futbolistas de Atlético, después de concluido el entrenamiento del día: pensando en el viaje a Bolivia, los jugadores comenzaron a hacer un tratamiento de recuperación dentro de una cámara hiperbárica, que ayudará a la recuperación y al fortalecimiento muscular de los “decanos”.

Después del duelo con el “Lobo”, sí, habrá descanso

Teniendo en cuenta que el próximo compromiso del equipo recién será el viernes 7 de abril, en Rosario, ante Central, es casi un hecho que el cuerpo técnico liberará a los jugadores. Resta saber si lo hará hoy mismo o bien después de una práctica de recuperación de mañana.

Dos delanteros que estarán ausentes, por precaución

Hoy se inicia la segunda fecha de los torneos de Juveniles de la AFA, con Temperley ante Rosario Central y Gimnasia contra Boca. El resto de la fecha se disputará mañana. Allí entrarán en acción los chicos del “Decano”, que recibirá a Godoy Cruz, desde las 9.

Tarde de concentración y noche de videos y análisis

Los 18 convocados por Lavallén se concentraron pasadas las 20 en el hotel Hilton, donde aprovecharon para ver imágenes del “Lobo” platense y analizar sus virtudes y defectos. Los que estuvieron ayer fueron: Lucchetti; Di Plácido, Meza Brítez, Canuto, Evangelista; Aliendro, Acosta, Leyes, Barbona; Molina; Zampedri (titulares); Ayala, Rosales, Palomino, Mendoza, Méndez, Álvarez y González.

Independiente vuelve a la actividad oficial ante Vélez

A diferencia de Atlético, que ya lleva jugados nueve encuentros, el “Rojo” de Avellaneda jugará recién su segundo partido oficial del año. Lo hará a las 21.15 contra Vélez, también por la fecha 18 del campeonato de Primera.

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