12 Abril 2017
BUENOS AIRES.- Crónica de un alejamiento anunciado. Tal definición bien le cabe al despido de Edgardo Bauza. Pero no sólo porque toda la Argentina futbolera daba por consumada su salida semanas antes de que se la anuncie oficialmente. También porque el rendimiento de la Selección no permitía imaginar su continuidad, en épocas en las cuales gobierna el resultado.
Lisa y llanamente, se trató del peor arranque de un entrenador, desde setiembre de 2006 -hace poco más de una década-, cuando asumió Alfio Basile su segundo período. Con Bauza, la Selección jugó ocho partidos: ganó tres, igualó dos y cayó los restantes: una eficacia de un 37,5%.
En este rubro le siguen el “Coco” y Alejandro Sabella. De sus ocho primeros encuentros, ambos se impusieron en cuatro (50%), empataron dos y perdieron los otros dos. Inmediatamente después se ubica Sergio Batista, que ganó cinco (62,5%), igualó dos y sólo cayó una vez. Los más eficaces resultaron Gerardo Martino y Diego Maradona: celebraron en seis ocasiones (75%), no cosecharon empates, y sólo fueron derrotados en dos juegos. De hecho, aunque estos dos debieron dejar el cargo envueltos en críticas, lideran la tabla de eficacia en la última década.
Diego fue el mejor: ganó el 75% de los partidos que disputó (18/24, incluidos los cinco de Sudáfrica de 2010). Nunca empató; pero fiel a su estilo de no andar con tonos medios, también es quien más perdió: un 25% (6/24).
El “Tata” dirigió 29 partidos en total, entre los que se cuentan los 12 de las ediciones 2015 y 2016 de la Copa América. Ganó 19 (65,5%); empató siete (24,1%) y perdió tres juegos (10,3%).
“Pachorra” comandó el seleccionado por 41 cotejos -incluyendo los siete de Brasil 2014-. Ganó 26 (63,4%), empató 10 (24,4%) y perdió cinco (12,2%).
Durante su segundo período, Basile logró un 50% de victorias (14/28); empató ocho (28,6%) y cayó en seis ocasiones (21,4%). Números similares ostenta “Checho”: triunfó un 47% de los partidos (8/17), igualó seis (35,3%) y cayó tres (17,6%).
Pero Bauza no sólo hizo aguas en el terreno de los resultados. También en la relación goles convertidos/recibidos: el equipo del “Patón” marcó nueve goles (1,1 por partido) y sufrió 10 (1,2). Martino lidera este ítem, con una diferencia de +18: su equipo marcó 22 tantos (2,7 por juego).
Lisa y llanamente, se trató del peor arranque de un entrenador, desde setiembre de 2006 -hace poco más de una década-, cuando asumió Alfio Basile su segundo período. Con Bauza, la Selección jugó ocho partidos: ganó tres, igualó dos y cayó los restantes: una eficacia de un 37,5%.
En este rubro le siguen el “Coco” y Alejandro Sabella. De sus ocho primeros encuentros, ambos se impusieron en cuatro (50%), empataron dos y perdieron los otros dos. Inmediatamente después se ubica Sergio Batista, que ganó cinco (62,5%), igualó dos y sólo cayó una vez. Los más eficaces resultaron Gerardo Martino y Diego Maradona: celebraron en seis ocasiones (75%), no cosecharon empates, y sólo fueron derrotados en dos juegos. De hecho, aunque estos dos debieron dejar el cargo envueltos en críticas, lideran la tabla de eficacia en la última década.
Diego fue el mejor: ganó el 75% de los partidos que disputó (18/24, incluidos los cinco de Sudáfrica de 2010). Nunca empató; pero fiel a su estilo de no andar con tonos medios, también es quien más perdió: un 25% (6/24).
El “Tata” dirigió 29 partidos en total, entre los que se cuentan los 12 de las ediciones 2015 y 2016 de la Copa América. Ganó 19 (65,5%); empató siete (24,1%) y perdió tres juegos (10,3%).
“Pachorra” comandó el seleccionado por 41 cotejos -incluyendo los siete de Brasil 2014-. Ganó 26 (63,4%), empató 10 (24,4%) y perdió cinco (12,2%).
Durante su segundo período, Basile logró un 50% de victorias (14/28); empató ocho (28,6%) y cayó en seis ocasiones (21,4%). Números similares ostenta “Checho”: triunfó un 47% de los partidos (8/17), igualó seis (35,3%) y cayó tres (17,6%).
Pero Bauza no sólo hizo aguas en el terreno de los resultados. También en la relación goles convertidos/recibidos: el equipo del “Patón” marcó nueve goles (1,1 por partido) y sufrió 10 (1,2). Martino lidera este ítem, con una diferencia de +18: su equipo marcó 22 tantos (2,7 por juego).