Afinoa exige apego al aspecto técnico más que al comercial

Gloria Pérez planteó la necesidad de que toda la actividad trabaje unida

ELIMINACIÓN. Cuando la planta es infectada la única solución es destruirla.  ELIMINACIÓN. Cuando la planta es infectada la única solución es destruirla.
15 Abril 2017
El avance del HLB en el Noreste Argentino (NEA) generó más preocupación en el centro citrícola del NOA, y en particular, en Tucumán, por lo que los productores y las entidades vinculadas con la actividad multiplicaron sus medidas de prevención y alertas contra la enfermedad. Dialogamos con la ingeniera Gloria Pérez, gerente técnico de la Asociación Fitosanitaria del Noroeste Argentino (Afinoa).

- Se complica más Misiones.

- Sí, efectivamente. El Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) informa que hay 200 casos positivos; para nosotros son unos 250. Pero lo grave es que pasaron de cinco a 15 las fincas comerciales afectadas por esta enfermedad. Entonces, Misiones está en una situación muy grave, lo que cambia totalmente el panorama.

El problema para el Senasa sigue siendo el NEA. Y era sabido que esto ocurriría, luego de que la ley sancionada delegara en los productores la realización de todas las tareas de monitoreo, de pulverizar los campos y de erradicar la enfermedad. Los controles en Misiones son supervisados por el Senasa, pero allí los productores no tienen una asociación fitosanitaria como la nuestra, por lo que les falta coordinar sus acciones. Por eso, en el NOA debemos extremar los cuidados, porque este movimiento de la enfermedad en el NEA genera altísimo riesgo.

- ¿Los sorprende esta evolución del HLB en esa región argentina?

- No, para nada. No nos sorprende este avance. Esta problemática fue manejada con mucha flexibilidad en el NEA.

Desde Afinoa llegamos hasta la justicia pidiendo que el Senasa no flexibilizara más las normativas vigentes, porque existe un Plan de Emergencia que establece normas y disposiciones de procedimiento. Todos los vinculados con la citricultura debemos cumplirlas. Pero la Justicia flexibilizó la aplicación de las normas.

Por eso, nosotros entendemos que el tema comercial nunca debe ponerse por encima del aspecto técnico. Nunca debe primar la razón comercial frente al problema técnico, nunca los negocios por sobre la normativa técnica. Primero siempre debe estar lo técnico, y después al aspecto comercial. No hay que destruir el aspecto técnico.

- Esta forma de proceder perjudica a toda la citricultura argentina.

- Por supuesto. Muchas veces se cambiaron las prioridades. Desde Afinoa luchamos con un amparo judicial para que deroguen la resolución en el NEA que trababa la aplicación de las normas. Protestaron y no nos escucharon. Y ahora el HLB camina por las rutas 12 y 14.

- ¿Qué novedades hay respecto de la barrera en La Florida?

- Ya está listo el pliego para la licitación. Los plazos están corriendo. Esperamos que los trabajos comiencen cuanto antes; estimo que sería dentro de uno o dos meses. Como siempre, el control oficial de la obra estará a cargo de Vialidad Nacional (VN). De todas maneras, Afinoa contrató un ingeniero civil y un arquitecto para que sigan los trabajos.

- Los productores del NOA siguen trabajando con nivel profesional.

- Sí, por supuesto. La gente tiene que entender que debemos seguir monitoreando, porque la detección precoz de la presencia de la Diaphorina citri y del HLB en el NOA nos puede dar un margen de ventaja.

Pero debo reconocer que aún hay productores que no se han sumado a la Red de Trampeo que funciona desde 2013 bajo el control de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc). Todos debemos sumar nuestros esfuerzos, porque si aparece el vector podremos actuar en consecuencia todos juntos. Necesitamos que todos los factores de la citricultura se sumen a este trabajo. Productores, industriales y comercializadores deben entender que el HLB va por todos.

Y otro aspecto muy importante, quizás fundamental en esta lucha, es que no traigamos fruta del NEA. Es un gran riesgo hacerlo porque hoy no sabemos qué está pasando en Corrientes y Entre Ríos. El Senasa está haciendo estudios y puede haber novedades.

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