Los rostros de la diversidad argentina
Se huele la salsa hirviendo de la abuela, un domingo a la mañana, mientras la familia espera los ravioles caseros. Se escuchan los tacones andaluces de una bailaora de pura sangre española que convierte en tablao cualquier piso de patio. Encandilan los brillos de los metales siriolibaneses y contagian de ritmo los carnavalitos bolivianos. Todo eso es la Argentina y un pedazo de todo eso forma parte del primer “Encuentro de los Pueblos, Unidos en la Diversidad”, que comenzó ayer en la Facultad de derecho de la UNT y que estará abierto hasta el miércoles.
Durante los cuatro días que dura el encuentro habrá charlas, cine debate, exhibiciones de varias colectividades internacionales radicadas en Tucumán y también se podrá visitar una muestra itinerante del Museo de la Inmigración, perteneciente a la Dirección Nacional de Migraciones. Se trata de un extracto de la muestra permanente instalada en el ex Hotel de Inmigrantes de Puerto Madero -actual sede de esa repartición nacional-, en el que se puede recorrer los 200 años de historia de la inmigración en la Argentina, plasmados en fotografías, infografías, cuadros estadísticos y mapas.
El encuentro es organizado por la Mesa de la Interculturalidad del Inadi -integrada por las diversas colectividades y asociaciones con asiento en la provincia-; la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación; la Dirección Nacional de Migraciones y la Facultad de Derecho. La actividad se realiza como parte de las conmemoraciones por el Día de Acción por la Tolerancia y el Respeto entre los Pueblos, que se celebra hoy, recordando el genocidio armenio.
Ayer, durante al acto inaugural, el delegado local del Inadi, Ramiro Granados, ponderó la labor de las asociaciones de colectividades en nuestra provincia. “Hacen un trabajo silencioso que busca el reconocimiento de sus orígenes. Es que todos esos pueblos (que se instalaron en nuestro país) junto con nuestros pueblos originarios, son nuestra gente. Y es desde esa diversidad que nos caracteriza que debemos seguir peleando contra la discriminación”, apuntó.
En un momento en el que la migración es un asunto de tensiones en todo el mundo, Damián José Paz, delegado en Tucumán de la Dirección Nacional de Migraciones, rescató aquello que nos une a todos por igual: “el género humano comprende todas las razas, todos los colores de piel, todas las culturas. Y en este momento en el que el mundo padece la seria amenaza de una guerra mundial, nosotros, desde esta ínfima célula que es este encuentro, defendemos la necesidad de recuperar los lazos que nos unen a los pueblos de nuestros abuelos”.
Actividades gratuitas
Hasta el miércoles, la muestra itinerante del Museo de la Inmigración estará abierta todo el día.
Mañana, a las 20, cine debate: fragmentos cinematográficos que abordan la problemática de la discriminación hacia los migrantes. Moderan miembros de la Escuela de Cine de la UNT.
Miércoles, a las 20. Genocidio Armenio (charla).
Miércoles, a las 21. La inmigración en el contexto mundial (charla).
una fiesta para los laburantes piamonteses
“Los piamonteses siempre se han caracterizado más por trabajar duro que por las fiestas o celebraciones. Pero había una fecha imperdible, que era la Fiesta de San Emiliano”, cuenta Patricia Ladetto y muestra una foto de inmigrantes piamonteses, principalmente del pueblo de Cigliano, que se reunían todos los 12 de septiembre a celebrar la vida del patrono de esa localidad italiana. La celebración se sostuvo hasta 1936. La foto que conserva la Asociación de Mujeres Piamontesas es el testimonio de una de las últimas reuniones.
UN OCEANO DE SUEÑOS
En la muestra se puede ver el interior de los vapores “Duilio” y Giulio Cesare”, dos de los barcos más importantes en el traslado de los inmigrantes italianos entre los años 1923 y 1944, y testigos de sus más íntimos sueños.
EL COLOR DE LA PUNA
La Comunidad Boliviana de Tucumán le puso ritmo y color al acto inaugural, ayer a la tarde en el patio de la Facultad de Derecho. Niños y adultos alegraron el encuentro con sus alegres carnavalitos.
PUEBLOS ARABES
Mónica Zarife es hija de inmigrantes libaneses, que llegaron de Deir El Kamar, una aldea en el centro-sur del Líbano. Los momentos más felices son las reuniones familiares, donde escuchan y bailan música libanesa pero también tango, los dos estilos que se escuchaban en la casa de su infancia.