Lavallén, duro tras la derrota de Atlético: "no sé cómo llegamos a esto"

El DT dijo que los jugadores no le responden. "Si supiera qué es lo que pasa, intentaría con otras respuestas. Pero no sé cuál es la causa".

INDICABA, PERO... Lavallén se volvió loco dando indicaciones ayer, pero al parecer algunos de sus dirigidos no lo escucharon. fotos de MATíAS NáPOLI ESCALERO / especial para la gaceta INDICABA, PERO... Lavallén se volvió loco dando indicaciones ayer, pero al parecer algunos de sus dirigidos no lo escucharon. fotos de MATíAS NáPOLI ESCALERO / especial para la gaceta

BUENOS AIRES, (Andrés Burgo, especial para LG Deportiva).- Como cuatro derrotas consecutivas nunca son gratuitas, y menos una como la de ayer, después de una actuación tan anémica, tan propia de un equipo entregado, Pablo Lavallén entró en el ojo de la tormenta para la próxima temporada. O, mínimamente, quedó bajo observación. No son teorías conspirativas: lo reconoció el propio técnico al salir del estadio ayer. En concreto, cuando Atlético debute en julio en la Sudamericana, tal vez Lavallén ya no sea más su DT.

“Esperemos el fin de semana para ver cómo continúa todo”, replicó cuando le preguntaron por los refuerzos para la próxima temporada. Y si con esa respuesta ya daba a entender que no está seguro de continuar al frente de Atlético, lo que dijo a continuación lo dejó más que claro: “voy a esperar a ver si hay respuesta (de los jugadores) el jueves (contra Vélez) y el lunes, en Patronato”.

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Lavallén vio lo que todos vieron: que Atlético fue ante Defensa un equipo mustio, sin corazón ni fútbol. Y no lo ocultó: “¿Qué me preocupa de hoy? Todo. No le encuentro la explicación. Para colmo jugamos contra un equipo que sabía a lo que jugaba, y está claro que nosotros no. El problema no es perder algunos partidos, sino como perdimos. Perder se puede perder siempre, el tema es que esta vez no tuvimos respuestas. Por eso me preocupa todo”.

En su breve conferencia antes de subir al colectivo, lo que más remarcó Lavallén fue su desconcierto para solucionar los problemas. A un equipo sin rumbo, un técnico desorientado. “Si supiera qué es lo que pasa, intentaría con otras respuestas. Pero no sé cuál es la causa. No entiendo cómo llegamos a esto”, dijo. “Si en estos seis meses nunca hubiésemos jugado a lo que nosotros pretendemos, ya me habría ido. Pero hace un mes jugamos un muy buen partido, contra Banfield, ganamos 3 a 0 y fue lo que nosotros queremos. Ese día jugaron los mismos futbolistas que hoy, salvo Fabio Álvarez. Y no creo que un jugador marque la diferencia. Por eso no sé por qué no hay respuestas”.

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La efectividad del DT desde que este año se sentó en el banco de suplentes es muy baja: Atlético apenas sumó 12 puntos de 42 posibles en el torneo. Fueron tres triunfos, tres empates y ocho derrotas que llevaron a Lavallén a su drástica decisión: los próximos dos partidos definirán si sigue o no.

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