Según Trump, en Rusia se ríen de los EEUU

Sostuvo que el FBI pierde tiempo investigando conspiraciones. El Presidente criticó a la agencia federal porque no tuvo en cuenta señales que alertaban sobre el asesino Nikolas Cruz

OPINIONES POR TWITTER. Por la red social, el jefe de Estado negó una conspiración rusa contra su país. REUTERS OPINIONES POR TWITTER. Por la red social, el jefe de Estado negó una conspiración rusa contra su país. REUTERS
19 Febrero 2018

El presidente estadounidense, Donald Trump, tuiteó ayer que nunca dijo “que Rusia no interfirió en las elecciones” de 2016 y sostuvo que el FBI no se percató del tirador de la escuela de Florida “porque gasta demasiado tiempo en probar la connivencia rusa con la campaña de Trump”. “Muy triste que el FBI se perdiera las muchas señales que envió el autor del tiroteo en la escuela de Florida, esto no es aceptable”, escribió Trump en un tuit poco antes de la medianoche. “Pasan demasiado tiempo tratando de probar que hubo conspiración rusa con la campaña de Trump, y no hubo conspiración. ¡Vuelvan a su trabajo esencial y hagan que estemos orgullosos!”, agregó en la red social.

Protocolos descuidados

El viernes, el FBI reconoció que cometió un error al no haber seguido los protocolos establecidos cuando el 5 de enero pasado recibió una alerta sobre el comportamiento agresivo y los planes de asesinar gente de Nikolas Cruz, el joven de 19 años que esta semana mató a 17 personas en un tiroteo en una escuela secundaria de Parkland, en el sur de Florida.

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Trump arremetió en muchas ocasiones contra el Departamento de Justicia y el FBI por su investigación de la trama rusa, que él considera una “caza de brujas”, y, por eso, su relación con el director de esa agencia de investigación, Christopher Wray, se tornó tensa en las últimas semanas.

La tensión escaló hasta tal punto después del tiroteo y el error declarado del FBI, que el gobernador de Florida y amigo de Trump, Rick Scott, pidió la renuncia de Wray.

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El “Rusiagate”

El llamado Rusiagate es una trama de intrigas entre la campaña presidencial de Trump y el gobierno ruso en 2016, que para la oposición demócrata resultó en un complot para ensuciar la campaña de la entonces candidata Hillary Clinton y beneficiar las chances del magnate republicano.

Después de meses de investigación, el FBI y la Justicia acusaron formalmente el viernes a 13 ciudadanos y tres entidades rusas, y ratificaron que su trabajo no terminó allí. Rusia negó en reiteradas ocasiones cualquier tipo de intromisión en las elecciones presidenciales en Estados Unidos y calificó de “gratuitas” y “carentes de fundamento” las acusaciones que se están expresando en su contra.

En su intento por descartar todos los avances de la investigación del FBI, Trump no duda en atacar a todos, incluidos sus propios asesores.

Contra los asesores

En otro tuit, el presidente le respondió a su asesor de seguridad nacional, H. R. McMaster, quien ayer había calificado de “irrefutables” las pruebas de la injerencia rusa en la campaña presidencial de 2016, como resultado de las acusaciones formales anunciadas por Muller.

“Al general McMaster se le olvidó decir que los resultados de la elección de 2016 no resultaron afectados ni cambiados por los rusos y que la única conspiración fue entre Rusia y la corrupta H (Hillary Clinton)” y los demócratas, alegó Trump.

“Si el objetivo de Rusia era crear discordia, desestabilización y caos dentro de Estados Unidos, entonces, con todas las audiencias en comités, investigaciones y odio de los partidos, han triunfado más que en sus mejores sueños. Se están partiendo de risa en Moscú. ¡Hay que ser más listos, Estados Unidos!”, agregó en su Twitter. (Télam)

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