El Gobierno y policías desmintieron el rumor de un supuesto paro

“Cada uno está cumpliendo su rol, en su lugar”, dijo Jaldo; mientras que un representante policial desechó un posible acuartelamiento.

Los rumores indicaban un acuartelamiento en la comisaría 12. LA GACETA/FOTO DE FRANCO VERA Los rumores indicaban un acuartelamiento en la comisaría 12. LA GACETA/FOTO DE FRANCO VERA
18 Marzo 2018

El Gobierno y uno de los representantes del personal de la Policía sostuvieron ayer que era falso el rumor sobre un supuesto acuartelamiento por parte de las bases de la fuerza de seguridad provincial, cuyo origen fue un audio que circulaba por la red social WhatsApp.

El jefe de Policía desmintió un acuartelamiento: "son personas mal intencionadas que llevan temor a la comunidad"

Publicidad

El vicegobernador, Osvaldo Jaldo, fue una de las autoridades del Poder Ejecutivo (PE) que desmintió de forma personal ese clima de incertidumbre. “Cada uno está cumpliendo su rol, en su lugar, con las tareas que le corresponden y, más que siempre, hay que estar trabajando en la calle contra el delito”, remarcó el funcionario para demostrar que el funcionamiento normal de los agentes de esa área.

El jefe de la Policía, José Díaz, aclaró, en un comunicado de prensa, que hay personas “con malas intenciones” que, por medio de audios de WhatsApp, “están llevando temor a la comunidad”.

Publicidad

Por su parte, el agente Víctor Nacusse negó también un posible acuartelamiento y un paro de los uniformados, como reacción a las muertes de los agentes que se registraron en los últimos meses y algunos procedimientos judiciales.

Tras la viralización de un audio en las redes sociales, la Policía desmiente que vaya a acuartelarse

“Estamos reclamando medidas concretas y rápidas de todos los poderes para afrontar la situación. Al hacer paro, no estamos ayudando, sino lo contrario, le estamos dejando la provincia a los delincuentes”, enfatizó Nacusse, que es uno de los referentes de los efectivos policiales.

Tras el asesinato de Marcelo Ruezga, quien recibió un disparo en la cabeza durante un robo el viernes, circuló una grabación por WhatsApp que advertía sobre un posible acuartelamiento de la Policía.

El audio generó, a su vez, una información vaga sobre una medida de fuerza en la comisaría 12. “Nos llamaron varias veces, pero acá no pasa nada. Eso es mentira”, respondió Giovani Autino, uno de los policías que se encontraban de guardia en la sede.

La muerte de Ruezga

“Vamos a acompañar a la familia del policía, llevaremos nuestro reclamo. No nos vamos a callar, pero todo lo haremos de manera respetuosa”, aseguró Nacusse, respecto de las hechos delictivos que ha sufrido el personal de la fuerza de seguridad. Adelantó que durante la semana este sector intentará reunirse con autoridades de los distintos poderes del Estado provincial para elevar las inquietudes de los agentes.

“Como ciudadano podría opinar de otra manera, pero voy a hacerlo respetuosamente y diré que la fiscala Adriana Giannoni es una fiscal del Ministerio Público que investiga el hecho y que es su trabajo. Los jueces son los que van a tener la última palabra”, dijo respecto del caso del menor Facundo Ferreira, caso por el que dos policías deberán declarar como imputados el miércoles.

Jaldo sobre el crimen de Ruesja: "vamos a seguir endureciendo las leyes"

“Hay mucha molestia contra ella, y en las redes sociales, realmente, se ven los ataques. Pero no hablemos de ataques o escraches policiales, porque los policías representan menos del 1% de los ciudadanos. Esos agravios vienen de parte de toda la sociedad, que está en un estado de desesperación. Como fuerza, vamos a mantener el respeto a ella. Entendemos que va a hacer su investigación y los jueces darán su veredicto”, enfatizó.

Nacusse difundió mediante las redes sociales un texto en el que advirtió que “los delincuentes se han apropiado de Tucumán”. “Han desintegrado el orden social, han pisoteado las instituciones y desgarrado al espíritu policial”, manifestó. “Cada policía sabe muy bien que portar un arma indica peligro, morir es una opción. Pero que en Tucumán en estos últimos años mueran más policías que en todo el noroeste argentino, es sinónimo de ‘desastre absoluto’. En Tucumán ser policía significa poner un pie en el cementerio, trabajar para morir”, añadió.

Jaldo dijo que el Gobierno apoya “el accionar policial dentro del marco de la ley” y que la Legislatura continuará sancionando leyes de seguridad. “Fundamentalmente, endureciendo las leyes para que la Justicia las aplique y los delincuentes estén donde deben estar: presos”.

“Apoyamos a la institución policial en estos momentos difíciles que está pasando. Este tipo de hechos no nos hará claudicar en nuestro accionar contra la delincuencia”, enfatizó.

Comentarios