BUENOS AIRES.- El jefe de Gabinete, Marcos Peña, negó ayer que exista la intención del Gobierno nacional de “eliminar las indemnizaciones ni perjudicar a los trabajadores”, y consideró que no hay motivos para generar un conflicto en relación a los proyectos enviados al Senado por el Ejecutivo en materia laboral.
Al término de una reunión de Gabinete que se desarrolló en la Casa de Gobierno, y consultado sobre las tres iniciativas enviadas el viernes por el PEN, Peña sostuvo: “no hay una reforma laboral sino muchos proyectos”. Y tras afirmar que “han sido consensuados con los miembros de la CGT”, reconoció que existe “una discusión puntual” vinculada con las indemnizaciones, pero aclaró que “no hay razones para generar una conflictividad”, en referencia a este tema.
De hecho, en ese punto, explicó que, en uno de sus proyectos, el Ejecutivo apunta a “clarificar la cuestión de las indemnizaciones” y, al mismo tiempo, “ir sacando del medio a la industria del juicio laboral, que termina funcionando de modo mafioso y perjudicando a las PyME y pequeños empleadores, que no tienen certidumbre sobre las reglas de juego a la hora de contratar un empleo”.
Además, subrayó: “las tres iniciativas tienen que ver con seguir fomentando la creación de empleos de calidad y formal en el país, cosa que está ocurriendo y es muy positiva”. Agregó que la propuesta de blanqueo laboral -una de las tres enviadas al Senado- “es muy importante para incorporar a trabajadores que no tienen la protección que tienen los empleados formales”. (Tëlam)