Caso Lebbos: “tenía miedo a sufrir represalias”, aseguró García

El testigo dijo que trató de “no ir en contra de sus jefes” por temor. Está preso desde hace dos años. Disparos y amenazas En una declaración en sede judicial, el ex jefe de la comisaría de Raco dijo que no habló antes porque sus superiores estaban en actividad

DE TRIBUNALES A VILLA URQUIZA. Después de declarar durante la mañana, el ex comisario es trasladado por la guardia del Palacio de Justicia hasta la cárcel. la gaceta / foto de jorge olmos sgrosso DE TRIBUNALES A VILLA URQUIZA. Después de declarar durante la mañana, el ex comisario es trasladado por la guardia del Palacio de Justicia hasta la cárcel. la gaceta / foto de jorge olmos sgrosso

“Ese día todos querían que yo hiciera algo. Era el hombre orquesta. Me pedían que buscara comida y hasta que consiguiera una lona. Yo no encubrí a nadie. Estaba cansado. Se documentó mal algo que no estaba en su lugar”, argumentó el ex comisario Enrique García al declarar como testigo en el juicio por el crimen de Paulina Lebbos y su encubrimiento.

Fue después de que se leyera el acta de las actuaciones del hallazgo del cuerpo de Paulina. Se trata de un documento fraguado en el que consta que fue la Policía la que halló los restos de Paulina y no los hermanos Sergio y Marcelo Goitea.

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El 28 de octubre de 2013, García declaró en sede judicial que no había hablado antes “porque estaban todavía en actividad los jefes”. García era, al momento del hallazgo, el jefe de la comisaría de Raco.

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Esa sede policial realizó las primeras actuaciones en el lugar donde fueron encontrados los restos de Paulina, a pesar de que no era su jurisdicción. “Tenía temor a represalias. Ya no tengo compromisos con nadie y no tengo nada que ocultar. Antes tenía temor de que le vaya a pasar algo a mi familia”, afirmó en esa oportunidad ante el fiscal Diego López Ávila.

Ayer García confirmó sus dichos. “Cada uno busca tratar de no ir en contra de los superiores, que a veces tienen facultades y pueden pasarte a retiro. Yo tenía familia y el entusiasmo de llegar hasta la última jerarquía. Uno no sabe cómo pueden tomarlo”, manifestó.

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El ex policía está detenido desde hace dos años en el penal de Villa Urquiza, donde cumple una condena de cinco años, precisamente por las irregularidades cometidas en la intervención del caso. Ahora aseguró que se trató “de una falta administrativa” y que la Policía “siempre busca agrandar las cosas”, ya que el hallazgo del cuerpo de Paulina era considerado “un logro” para la fuerza.

Supuestas amenazas

Aunque el testigo aseguró que no estaba amenazado, relató que vivió una serie de situaciones que le hicieron sospechar que estaba en peligro. Describió un ataque que sufrió durante un tour de compras, cuando, según dijo, desconocidos le dispararon al vehículo en el que se movilizaba. “Relacioné ese ataque con el juicio. Me sentía perseguido. Tenía miedo”, señaló.

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“Yo presenté pruebas para el caso y terminé detenido. Era evidente que yo quería contribuir. Yo no quería ocultar ni cambiar nada. Presenté una declaración que encontré en un cajón de la comisaría y terminé preso”, aseguró García al declarar por segunda jornada consecutiva en el juicio.

García se refiere a la declaración de Diego Sebastián Nieva. Se trata del remisero que conducía un auto rural con el que realizaba el trayecto desde avenida Avellaneda y Francia, en la capital, hasta Raco. El 10 de marzo de 2006, un día antes del hallazgo del cuerpo de Paulina a la vera de la ruta 341 en Tapia, el entonces oficial Manuel Yapura le tomó una declaración.

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La Policía tenía la orden de identificar todos los Fiat Duna rojo que funcionaban como remise, y Nieva le contó a Yapura cómo eran sus horarios de trabajo y su recorrido habitual. Sin embargo, a la fiscalía llegó otra acta, con una declaración más extensa y, según se comprobó más adelante, con una firma “trucha” del remisero.

Ayer, García confirmó que Yapura confeccionó la declaración de Nieva por orden de Rubén Brito, quien era jefe de la Regional Norte.

“Yapura confeccionó el acta. Brito le dijo que estaba como pobre la declaración (sic), que había que cambiarla. Era una declaración falsificada”, sostuvo. “Brito estaba molesto porque presenté el acta en Tribunales y pasé sobre él. Estaba muy enojado; me retó”, contó.

Hoy, el testigo declarará por tercera jornada consecutiva.

Galería 17 fotos Las manos de la vergüenza. Al cubrirse con una campera las manos y cargar su maletín, el ex Jefe de Policía Hugo Sánchez, genera dudas sobre si es esposado o no al momento de ser trasladado desde la sala de juicio hasta la División Antidrogas de la Policía Federal donde cumple prisión preventiva hasta que finalice el proceso oral y público. Sánchez está acusado de haber presionado a un testigo en el juicio. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Un careo que no resolvió las contradicciones. El comisario Daniel Alejandro Díaz estuvo cara a cara con Fernando Vázquez Carranza, quien era el director de Criminalística de la Policía y su superior inmediato en la cadena de mandos. Díaz sostuvo que fue Vázquez Carranza quien le ordenó que filmara con su cámara personal en el lugar donde fueron encontrados los restos de Paulina Lebbos. Vázquez Carranza negó la versión de Díaz. También descartó que su subordinado le hubiera entregado una copia de esas imágenes. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El ex Subjefe de Policía de Tucumán acusado de encubrimiento, Nicolás Barrera, escucha al abogado defensor José Luis Chaván. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los acusados Roberto Luis Gómez y Hugo Rodríguez durante el debate. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El testimonio del comisario Daniel Díaz, que en la fecha del hallazgo del cuerpo de Paulina, era el jefe de la División Criminalística Norte, generó dudas al no poder explicar por qué no puso inmediatamente a disposición de los investigadores las fotografías que había tomado en la escena el perito Fabián Toledo, quien actuaba bajo sus órdenes. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los vocales Rafael Macorito y Dante Ibañez, escuchan al comisario Daniel Díaz durante el careo. Díaz, no aclaró los motivos por los que no reveló que tenía filmaciones en las que había registrado parte de la escena del hallazgo y la autopsia. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El ex Jefe de Policía, Hugo Sánchez, acusado de encubrimiento, conversa con Gustavo Morales, abogado defensor del ex Secretario de Seguridad de la Provincia, también acusado de encubrimiento, Eduardo Di Lella. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los acusados de encubrimiento, Héctor Brito, ex Jefe de la Unidad Regional Norte, y, Nicolás Barrera, ex Sub Jefe de Policía, conversan momentos antes de que se inicie el debate. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El pedido de detención del testigo Daniel Díaz, fue solicitado por el fiscal coadyuvante Diego López Ávila, quien además investigó y formuló la elevación a juicio del caso. El funcionario judicial también había pedido al tribunal que el policía fuera investigado por presunto encubrimiento. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los ex policías, Héctor Brito y Hugo Sánchez, durante un cuarto intermedio al término del careo entre Díaz y Vázquez Carranza. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Comisario detenido por falso testimonio. “Díaz forma parte de las maniobras que se realizaron para encubrir el crimen de Paulina. En el juicio continúan apareciendo pruebas contundentes sobre la protección que tuvieron los asesinos”, dijo Alberto Lebbos, padre de la víctima. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
En la declaración testimonial del primer fiscal que investigó el caso, Alejandro Noguera, advirtió irregularidades en la escena. “(Eduardo) Di Lella me anticipó que estaba todo listo para que personal policial procediera a retirar el cuerpo hallado. Le pregunté si se encontraba la doctora (Lilia) Moyano, de la Policía Científica. Me contestó que aún no se había hecho presente. En ese momento le pregunté si era boludo o se hacía. Le advertí que nadie tocaría el cuerpo hasta que yo lo dispusiera”. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El ex jefe de Policía Hugo Sánchez, junto al ex Sub Jefe Nicolás Barrera y el abogado defensor Gustavo Carlino quien señaló "Me da vergüenza haber observado que con el tiempo transcurrido venga Gendarmería y encuentre elementos de prueba". LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
El Tribunal y todas las partes, pudieron observar el video que realizó Gendarmería por la gestión de Alberto Lebbos, padre de la víctima, ante la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, el 5 de abril de 2006. Para Lebbos “la reconstrucción de Gendarmería demostró las maniobras de encubrimiento”. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los hermanos Sergio y Marcelo Goitea, Hugo Rodríguez, Enrique García y Lilia Moyano indicaron el lugar en el que el vieron el cuerpo de Paulina. Todos señalaron un lugar diferente.“Es una muestra de que el cuerpo fue movido del lugar donde fue arrojado. Es un horror. La Policía no cometió irregularidades, sino delitos graves para proteger a los asesinos. Se pueden observar todas esas maniobras. Casi un mes después del hallazgo seguían apareciendo pruebas en la escena”, sostuvo Alberto Lebbos. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Los ex policías, Nicolás Barrera y Hugo Sánchez, junto aL abogado José Luis Chaván, al finalizar la reproducción del video de Gendarmería. LA GACETA / FOTO DE JORGE OLMOS SGROSSO
Alberto Lebbos elevó, la semana pasada, ante el Senado, los casos de amedrentamientos a testigos del juicio oral, que se desarrolla para esclarecer el crimen de su hija, Paulina, ocurrido en 2006. “Estoy denunciando la impunidad que está reinando en la provincia de Tucumán. Impunidad que promueve el clan (José) Alperovich-(Beatriz) Rojkés”, dijo el padre de la víctima.
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