A tres meses del asesinato de Facundo Ferreira (12), su familia y organizaciones de derechos humanos se concentraron frente a los tribunales penales de avenida Sarmiento al 400. Además, la querella y la familia se entrevistó con la fiscala Adriana Gianonni, quien está al frente de la investigación.
Las fuentes judiciales consultadas informaron que la funcionaria judicial les habría explicado que espera que la próxima semana (posiblemente el miércoles) lleguen los resultados de una pericia clave. Se trata del denominado “barrido electrónico de pólvora”.
Se trata de un examen químico que intenta encontrar residuos de un disparo en la piel. De esta forma, marca qué elementos químicos se encuentran, usualmente, en la mano del autor del disparo.
Como en la provincia no se cuenta con ese tipo de tecnología, la medida fue realizada en Salta y luego remitida a Chaco. Una vez que Gianonni tenga en sus manos los resultados de esos estudios, analizará la imputación contra los policías Nicolás González Montes de Oca y Mauro Díaz Cáceres. “El reclamo central es que ya están los elementos necesarios para que ambos agentes sean llamados a declarar como imputados”, señaló la abogada Florencia Vallino.
“Todos los elementos configuran un caso de ‘gatillo fácil’. Hubo un accionar policial criminal. Es un caso testigo de la violencia policial en el país”, agregó. “Lo que pedimos es que los detengan. Ellos mataron a Facundo. De eso no tenemos duda. Queremos Justicia”, expresó Rita Ferreira, tía del niño. En la madrugada del jueves 8 de marzo pasado Facundo murió tras recibir un disparo en la nuca durante una persecución policial en “El Bajo”.