Tregua de choferes: no habrá paro de colectivos

Carmela Moreno insultaba al aire bajo el sol del final del invierno, en Colón casi Independencia. Llevaba poco más de 40 minutos esperando un colectivo de la línea 18 el mediodía de ayer. No era la única. “Tengo los minutos contados para llegar, cocinarle a mis hijos antes de que vayan a la escuela, y salir para mi trabajo. Ya estoy llegando tarde a todas partes”, dijo resignada la mujer de 37 años.

La escena se repitió en toda la provincia: los trabajadores de las empresas de transporte público definieron reducir la frecuencia de los coches para reclamar por la deuda de un ítem acordado en paritarias. Si los empresarios no pagaban ayer el adicional de $ 2.000, desde la Unión Tranviarios Automotor (UTA) habían adelantado un paro total de la actividad. Sin embargo, los dueños de las empresas se comprometieron a saldar la deuda en 48 horas.

“Tuvimos una reunión con los empresarios y aceptamos el compromiso: prometieron pagar el ítem de $ 2.000 pautado en paritarias en los próximos dos días. El jueves (por mañana), ya todas las empresas harán los depósitos”, explicó César González, secretario general de UTA. El sindicalista aseguró que, con el compromiso aceptado, se descartó el paro anticipado horas atrás. Lamentó el impacto de la medida de fuerza a los usuarios. Hasta el lunes, cuando se definió en asamblea reducir la frecuencia, sólo tres empresas habían pagado la suma: Exprebus, El Provincial y ByV Transportes SRL (explota la línea 19).

Jorge Berreta, vicepresidente de la cámara empresaria, aseguró que la situación del sector es crítica. “De esta crisis se sale con subas de tarifa y con medidas políticas que apunten a sustentar el transporte, no hablamos de rentabilidad. El transporte público está pasando su peor momento. Hemos agotado el endeudamiento y hacemos esfuerzos enormes. Pero hace mucho que los egresos son más que los ingresos. Estamos trabajando a pérdidas. Será difícil pagar los sueldos el próximo mes”, finalizó.