La gravísima crisis que atraviesa el Instituto Nacional de Teatro (INT) tiene ramificaciones en todo el país, porque afecta el funcionamiento de los elencos independientes en cada provincia. En Tucumán, los teatristas se reunieron en asamblea y resolvieron tomar pacíficamente mañana, desde las 9.30, la oficina local de ese organismo (ubicada en un edificio de Salta al 100 en defensa de la Ley Nacional de Teatro 24.800 (vigente desde hace dos décadas), de la representación federal en ese ente y del Consejo de Dirección, cuerpo que define las acciones a ejecutar; y en contra de todo intento de intervenir el INT.
La puja entre el director nombrado por el Poder Ejecutivo Nacional, Marcelo Allasino, y el secretario general designado por el Consejo, Miguel Palma, ha derivado en un funcionamiento irregular del INT. “Esta situación mantiene en vilo a la comunidad teatral del país y paraliza la concreción de los apoyos previstos al teatro -plantearon los teatristas reunidos en asamblea-. Los artistas nos declaramos en alerta y movilización en defensa del normal funcionamiento del Consejo, al cual reconocemos como organismo de nuestra representación plena y cuyo funcionamiento corre peligro de desintegración por las pugnas intestinas y la persecución política de la cual son objetos algunos miembros”. Se refieren, entre otros, a Palma y a la tucumana Nerina Dip, representante del quehacer teatral nacional en ese órgano, que está siendo investigada por presunta incompatibilidad de cargos.
El plenario también rechazó todo recorte al presupuesto del INT en 2019 y exigió el inmediato aumento de los aportes de este año “para paliar la devaluación y la inflación que perjudicó sensiblemente a la actividad”.
Además pidió que se tomen delegaciones en otras provincias y que se organice una marcha a la sede central en la Capital Federal.