31 Octubre 2018
El DT de Boca, Guillermo Barros Schelotto. ARCHIVO
Los dirigentes de Boca quieren evitar lo que sucedió anoche con Marcelo Gallardo, quien ingresó al vestuario de River en el entretiempo durante el partido que el Millonario le ganó 2 a 1 a Gremio de Porto Alegre, en Brasil, por la semifinal de la Copa Libertadores. Por una penalización de la Conmebol, el entrenador tenía prohibido tomar contacto con sus jugadores.
La dirigencia xeneize le pidió expresamente al DT Guillermo Barros Schelotto que cumpla al pie de la letra la suspensión que recibió de cara a la revancha frente a Palmeiras, destaca TyC Sports.
El Mellizo recibió la sanción por la salida tarde de su equipo en el segundo tiempo del choque de ida frente a los brasileños. Lo mismo le había ocurrido en la serie de octavos de final ante Libertad, cuando en Asunción el entrenador del conjunto xeneize fue su hermano Gustavo.
La pena de la Conmebol se enmarca en el artículo 76.1, que indica: “No podrá acceder al vestuario, túnel, banca o área técnica antes ni durante el partido, ni podrá por ningún medio comunicarse con su equipo”. Además, Guillermo deberá pagar U$S 1.500 y Boca, U$S 23.000 (serán tomados de los derechos de televisación o patrocinio).
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