27 Diciembre 2018
la gaceta / Foto de José Nuno
En La Ciudadela se viven horas clave. La directiva, con Roberto Sagra a la cabeza, trabaja en la concreción de las negociaciones por los jugadores que solicitó Gastón Coyette como refuerzos. El DT dejó en claro que necesita un futbolista por línea para apuntalar un plantel que tiene como objetivo ineludible, para la primera mitad de 2019, asegurar la permanencia en la Superliga.
Desde que San Martín dejó el Federal A, los mercados estivales nunca fueron un aliado a la hora de potenciar planteles. Durante los últimos dos recesos, en las temporadas 2016/17 y 2017/17 de la B Nacional, los futbolistas que desembarcaron en Bolívar y Pellegrini no terminaron de confirmar todo lo bueno que se hablaba de ellos antes de llegar a San Martín. En el primer parate, se sumaron Leandro Gracián y Juan Galeano. Pese a una gran carrera como futbolista, “Tano” nunca terminó de consolidarse en La Ciudadela. Apenas jugó cinco partidos como titular y marcó un gol. Galeano, por su parte, fue quizás el que mejor suerte tuvo, pese a no ser importante en el primer semestre. Lo del volante bonaerense recién resultó clave en la recta final de la pasada temporada. A principio de año, arribaron Emiliano Albín y Damián Arce, quienes tampoco supieron dar el salto de calidad.
Por eso, los dirigentes deben afinar la mira lo máximo posible. En San Martín esperan que esta vez los refuerzos sí aporten a una causa que resulta casi de vida o muerte.
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