Un tucumano en Notre Dame: "pensamos que era un atentado"

A 100 metros de la catedral, las llamas podían verse con claridad. Foto de Gonzalo Zalazar Romero. A 100 metros de la catedral, las llamas podían verse con claridad. Foto de Gonzalo Zalazar Romero.

Gonzalo Zalazar Romero se encuentra en París con su familia y estuvo a metros de las llamas que se devoran la catedral gótica

15 Abril 2019

No es la primera vez que Gonzalo Zalazar Romero visita París, pero no quedan dudas de que este será uno de los viajes más recordados. Es que el tucumano, su esposa Andrea Desjardins y su hija, vieron en primera fila el incendio de la catedral de Notre Dame. Una "excursión" de lo menos esperada, pero un momento histórico al fin de cuentas.

"Llegamos anoche (por el domingo) a París y nos acostamos a dormir. Nos levantamos al mediodía y salimos a pasear en el auto. De casualidad puse Notre Dame en el GPS, como para tener un punto de referencia. De camino, y muy a lo lejos, comenzamos a ver la columna de humo", relató Gonzalo.

Entre el susto, el impacto y la tristeza. Entre esas sensaciones fluctuó la vida de la "ciudad luz" ayer. Primero el susto, porque con la primeras noticias del incendio pensaron que se trató de un atentado, una amenaza permanente en la capital francesa. Impacto y tristeza por ver el fuego devorándose el más emblemático ejemplar de la arquitectura gótica.

"En un primer momento pensamos que era un atentado y en la ciudad se lo vivió como si se tratase de un ataque. Había desconcierto y caos. Nosotros llegamos hasta ahí, estuvimos a 100 metros en el auto, todavía no cortaban el tránsito. Al parecer a ellos también los tomó de sorpresa. De hecho yo me enteré del incendio porque unos amigos de Tucumán nos dijeron lo que pasaba y ahí prendimos la radio. Era muy caótico todo", relató el viajero durante una entrevista telefónica con LA GACETA .

Cuando Gonzalo llegó al frente de la Catedral, recién comenzaban a trabajar los bomberos, en medio de corridas y gritos. Los tucumanos siguieron las noticias por la radio y los diarios digitales, tratando de saber si se trató o no de un atentado. "Primero no decían nada, luego explicaban que el incendio podría haber estado vinculado a las obras que se estaban haciendo en la catedral. Ahora estamos más tranquilos, pero hemos decidido suspender las excursiones más turísticas que íbamos a hacer, como la torre Eiffel. Está todo muy sensible y nosotros también, preferimos omitir el riesgo y hacerlo en otro momento", finalizó.

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