Denuncian que Maduro “ocupó” el Parlamento
No pudo sesionar la Asamblea Nacional porque policías y militares cortaron el acceso, ante la amenaza de que había explosivos. La oposición al gobierno venezolana acusó al chavismo de armar “un show para impedir el funcionamiento” del órgano legislativo. Buscarán otra sede para hoy.
CARACAS.- La oposición denunció la “toma militar” de la Asamblea Nacional por la irrupción de agentes de la Guardia y la Policía nacionales bolivarianas (GNB y PNB) y del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) que cortaron el paso a diputados, empleados y prensa, y suspendió la sesión ordinaria del Parlamento, que se iba a realizar ayer.
Según el diario venezolano “El Nacional”, los agentes llegaron muy temprano al Parlamento y se desplegaon en los alrededores y en el interior dando como única explicación que buscaban artefactos explosivos. “¿Otro cuento chino?”, cuestionó el diputado opositor Biagio Pilieri, en Twitter.
Según el Centro de Comunicación Nacional, que ejerce de oficina de prensa del opositor Juan Guaidó, que llama a deponer al presidente, Nicolás Maduro, tampoco dejaron entrar al personal de seguridad que pretendía verificar la situación. El órgano de prensa opositor consideró que las “fuerzas represivas” tomaron el Congreso para impedir la sesión ordinaria, que iba a abordar “la destrucción del poder adquisitivo del venezolano”, las acciones judiciales contra diputados y la reincorporación de Venezuela a la Convención Americana de Derechos Humanos.
Policías de inteligencia con armas largas y capuchas, y grupos de militares rodeaban varias cuadras cercanas al Congreso a la hora de inicio de la sesión. El operativo comenzó con la búsqueda de un presunto artefacto explosivo en la sede del Congreso. Los funcionarios no bloqueaban el tráfico en la zona, ni el paso de transeúntes.
“Todo esto es parte del show para impedir el funcionamiento de la Asamblea Nacional”, dijo el parlamentario Juan Pablo Guanipa. “Esta es una dictadura que persigue a la disidencia y luchamos para que se produzca un cambio político”, acotó.
En un primer momento, el también diputado opositor Luis Stefanelli anunció que celebrarían la reunión parlamentaria en una “sede alternativa”. “Nosotros no vamos a dejar de legislar, así sea debajo de un puente o en una plaza”, declaró.
Después de varias horas, finalmente la Asamblea Nacional informó que, “debido a la toma militar del Palacio Federal Legislativo”, la sesión fue aplazada para hoy, con el mismo orden del día, aunque no se informó a dónde.
Guaidó, autoproclamado presidente encargado de Venezuela, denunció el “secuestro” de la Asamblea Nacional. Dijo que, mientras los uniformados entran en el hemiciclo, “el dictador se atrinchera solo, en un Palacio en el que no debe estar, sospechando de todos a su alrededor”.
La semana pasada, agentes de la Guardia Nacional Bolivariana se desplegaron en los alrededores del Parlamento e impidieron el acceso a la prensa nacional e internacional y a los trabajadores de la sede legislativa que no tuvieran la acreditación pertinente.
Estos movimientos se producen en medio de lo que Guaidó tilda de “golpe al Parlamento” por la detención de su vicepresidente, Edgar Zambrano, y las acciones judiciales contra una decena de diputados.
La crisis política que venía arrastrando Venezuela empeoró el 10 de enero, cuando Maduro asumió un segundo mandato, tras haber ganado unos comicios que la oposición no reconoce porque dice que hubo fraude. Entonces, Guaidó se proclamó mandatario interino el 23 de enero para cesar la “usurpación”, crear un gobierno de transición y celebrar “elecciones libres”.
EEUU, la mayoría de los países latinoamericanos, incluido Colombia, y numerosos europeos le han reconocido. La situación se agravó el 30 de abril, cuando Guaidó y un liberado Leopoldo López capitanearon un alzamiento militar que, de acuerdo con la versión de Estados Unidos, se vio frustrado a causa de la intervención de Rusia y Cuba. (DPA-Reuters)