PERFIL
TODO MESSI
JORDI PUNTÍ
(Anagrama - Barcelona)
De Lionel Messi, ¿ya está todo dicho en materia de adjetivación? ¿Es que se habrán agotado las posibilidades expresivas capaces de dar cuenta de sus destrezas llevadas al tope mismo del canon?
Mundiales al margen y al margen de la cruel ligereza dispensada por los argentinos que reducen a Messi a la mera categoría de un futbolista que ha sido incapaz de ganar solito y solo el Mundial de un deporte colectivo, ¿quedará tinta, quedarán piezas sueltas o incompletas, habrá por dónde entrar a una semblanza que resista la baratija del lugar común?
El propio autor de Todo Messi, Jordi Puntí, se formula tales preguntas de forma directa, lateral o sobreentendida, sin que reconocer los riesgos de “rizar el rizo” –que así dirían en España- implique retroceder, abrir el paraguas, pedir clemencia o entregar un trabajo descafeinado.
Más bien lo contrario. Acaso por sentir que nada tiene que perder, puesto que es el suyo un libro que de antemano declina todo afán probatorio, Puntí se siente habilitado a decir lo suyo a su manera y en los términos que prescriben su entendimiento del fútbol y su impronta narrativa. “Leo Messi es mi jugador favorito”, confiesa, más temprano que tarde, este filólogo, articulista, traductor y narrador que destaca en el horizonte de la literatura catalana de estos días.
En ese contexto no será casual que Todo Messi contenga el subtítulo de Ejercicios de estilo, en la medida que, al parecer, subyace un contrapunto entre el estilo de Messi y el estilo del autor de estas variaciones. Dicho de otro modo, si un estilo se define por un conjunto de rasgos peculiares, singulares, característicos, en el mismo abocarse a poner de relieve los talentos del prodigio de la pelota Puntí deja ver sus propias habilidades narrativas. Entre otras, pluma cincelada, agudeza, desafíos puestos en el contexto adecuado y la fundamentación adecuada.
En suma, y para botón de muestra, Puntí ofrece una consistencia a toda prueba: fue escrito antes del Mundial de Rusia, dispensa el último capítulo al Mundial de Rusia, ya sabemos cómo les fue a Messi y a la Selección Argentina en el Mundial de Rusia y sin embargo el texto no sufre mella significativa. Como en las buenas novelas policiales donde poco importa saber quién ha sido el autor del crimen, Todo Messi es atrayente, desenvuelto, grato y sustancioso.
© LA GACETA
WALTER VARGAS