Cuatro desconocidos armados y encapuchados irrumpieron violentamente ayer a la tarde en la casa del comisionado comunal de Alto Verde (Chicligasta), Eduardo “Cacho” Alfaro. El funcionario fue agredido con mucha violencia por los delincuentes, que buscaban el dinero que supuestamente tenía para cubrir la logística de los comicios mañana.
Pero Alfaro, que terminó internado en el hospital Miguel Belascuain de Concepción, no tenía los valores que le exigían. “¡Entregá la plata, si no te hacemos m…!”, le repetían los atacantes mientras le asestaban culatazos en diferentes partes del cuerpo, reveló un allegado al comisionado comunal.
Un golpe severo en la cabeza lo hizo desplomar al suelo, donde quedó semidesvanecido. De acuerdo al mismo informante, uno de los desconocidos al menos gatilló dos veces su arma contra Alfaro, pero los proyectiles no salieron.
Cuando irrumpieron los asaltantes, alrededor de las 13.30, el funcionario se encontraba solo en su vivienda. “Una vecina escuchó los gritos de los delincuentes y de Alfaro cuando era agredido. Enseguida alertó a la Policía. Esta arribó cuando los encapuchados ya se habían retirado en las motos en que llegaron”, dijo otro lugareño.
De acuerdo a los investigadores, los hombres no se llevaron ningún objeto de valor. Por ello se deduce que solo fueron a buscar dinero.
Alfaro, que busca su relección en los comicios de mañana, fue trasladado por un colaborador suyo hasta el hospital de Concepción. Ahí fue atendido de las heridas, sometido a estudio de diagnóstico por imágenes y, luego de permanecer en observación dos horas, dado de alta.
Aunque algunos allegados al funcionario deslizaron sus sospechas de que se trató de una agresión que tiene connotación política, varios vecinos coincidieron que el hecho es propio del clima de inseguridad que se vive en el pueblo desde hace tiempo. “Hace pocos días un comerciante de apellido Medina sufrió un ataque similar por parte de desconocidos que lo abordaron en la puerta de su casa. También lo golpearon para exigirle plata”, comentó un hombre que solo se identificó como Darío.
“Este pueblo es tierra de nadie. Los delitos comunes se suceden casi todos los días. De ahí que lo le sucedió a Alfaro no es nada extraño”, añadió.
“No puede haber seguridad cuando en la comisaría hay apenas dos uniformados por guardia. Y solo uno puede salir a patrullar. Se trata de un pueblo con más de 3.000 habitantes”, remató.
El segundo jefe de la Regional Sur, comisario inspector Pedro Gómez, dijo que sobre la agresión a Alfaro se están desplegando distintas líneas de investigación con el objeto de dar los atacantes.
En el caso tomó intervención el fiscal Jorge Echayde, del Centro Judicial de Concepción. Alfaro, luego de ser dado de alta retornó a su domicilio a guardar reposo por recomendación médica.
Los parientes de la víctima dijeron que no estaba en condiciones de hablar con la prensa.