BELO HORIZONTE.- Una vez más, Lionel Scaloni demostró que no está a la altura de las circunstancias. El entrenador del seleccionado argentino sigue sin encontrar el rumbo.
Primero decidió hacer cuatro cambios con respecto al equipo que debutó en la Copa América, dejando en el banco a dos históricos como Sergio Agüero y Ángel Di María. El “Kun” no había tenido un flojo rendimiento en el primer encuentro, por lo que fue una variante que sorprendió. Lo de “Fideo” estaba justificado porque había sido uno de los que menos rindió.
Agüero fue el primero en ingresar en reemplazo del tucumano Roberto “Maxi” Pereyra. El delantero hizo muy buena dupla en ataque con Lautaro Martínez. Y de esa unión se concretó la mejor jugada colectiva del equipo. Agüero le ganó a su marcador, asistió a Martínez y el remate del delantero del Inter se desvió en el brazo de Iván Piris en su camino hacia impactar en el travesaño. Tras la consulta al VAR del árbitro brasileño cobró penal y llegó el gol del empate.
“Fuimos más peligrosos con Agüero, Lautaro y Messi”, explicó el DT. La Selección estaba en su mejor momento y el segundo gol parecía estar al caer, cuando en forma sorpresiva Scaloni decidió la segunda variante y tal vez la más errada. Se jugaban 21’ del complemento cuando sacó a Lautaro y mandó a la cancha a Di María. El ex jugador de Racing mostró toda su bronca al golpear una botella varias veces en la zona del banco de los suplentes. “Lautaro no estaba bien. Continuó porque es un animal, pero recibió una paralítica muy fuerte y estaba complicado. Estaba dolorido y tenía la zona hinchada. Por eso hice el cambio con Di María. Espero que llegue al otro partido. El cambio del ‘Tucu’ Pereyra fue táctico”, explicó el entrenador.
La versión de Martínez fue totalmente distinta. “En el entretiempo me masajeé donde tenía la molestia para que no se me contracturara rápido. Estaba para seguir, pero es una decisión del entrenador”, dijo el futbolista, dejando abierta la polémica.
Y el tercer cambio, que llegó a los 39’ del segundo tiempo, tampoco aportó nada. Matías Suárez ingresó por Rodrigo de Paul y prácticamente no participó en el juego.
Franco Armani, que levantó el nivel, tiene la mente en Qatar. “Tenemos que dejar todo en el último partido para lograr la clasificación. Tengo la confianza de que el domingo conseguiremos un triunfo y lograremos el primer objetivo”, señaló el arquero que atajó el penal. (Especial)