Por LA GACETA
27 Junio 2019
La tapa de hoy es un ejemplo paradigmático del poder de las historias en el periodismo. A todo el ancho, y ocupando casi media portada, la imagen central es también el título principal. Es una historia. Una que no tiene que ver con las elecciones, a pesar de que aún estamos en junio, el mes durante el cual se realizaron los comicios provinciales y empezó a definirse la votación nacional. Pero aunque pareciera que 2019 es una campaña que nunca se acaba, la primera plana fue ganada por un tema diferente. Una historia cuya sola formulación parecía arcana: en Tucumán hay vecinos de localidades linderas a San Miguel de Tucumán donde un mito ha ganado lugar en las creencias de los vecinos. Y en los frentes de sus casas. Y se trata de una “creencia” porque no está atada a razones comprobables. Todo por el contrario. Arriba del medidor de consumo de energía eléctrica, los ciudadanos colocan una botella de agua con la esperanza de que eso “haga” que se registre un consumo menor y la boleta llegue más barata. Nadie acierta a responder dónde se enteró del sortilegio. Y algunos aseguran, contra toda ciencia, que funciona. La crisis desespera en estos fenómenos. E incuba leyendas urbanas.
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