“Conocemos bien el rol social que cumplen los clubes y cómo se pusieron a disposición ofreciendo sus instalaciones para combatir esta pandemia. Por eso, vamos a acompañarlos en este momento crítico con estas medidas y con otras que anunciaremos oportunamente”, dijo Matías Lammens, titular del Ministerio de Turismo y Deporte, llevando algo de tranquilidad al mundo del deporte.
El extitular de San Lorenzo conoce bien lo que es llevar adelante una institución y sabe que, con el deporte totalmente detenido, cumplir con las obligaciones adquiridas es una operación de riesgo. Por eso, fue el principal impulsor de una batería de medidas que tienen como principal objetivo, entre otras cosas, ayudar a las instituciones deportivas a sobrellevar el desfasaje financiero que provocará, irremediablemente, el paso del coronavirus.
Entre las medidas más importantes se destaca la reducción o la postergación del pago de los aportes patronales y contribuciones sociales del mes de marzo y el pago de asignaciones compensatorias al salario para clubes con menos de 100 empleados.
Eso sí, las instituciones que tengan una nómina superior de personal podrán acceder a los llamados programas de Reproducción Productiva (Repro); una prestación mínima por trabajador de $6.000 y con un tope de $10.000. Lo que destaca el anuncio lanzado es que la medida es exclusiva para los trabajadores en relación de dependencia y que no incluye a los futbolistas profesionales.
Las instituciones deportivas tendrán unos días para intentar adherirse al programa. Para ello, deberán presentar la documentación requerida para acceder a los beneficios y cumplir con una serie de requisitos. Aunque claro, deberán demostrar que sus actividades fueron afectadas de manera efectiva por la pandemia y mostrar una reducción relevante en sus ingresos luego del 20 de marzo de 2020. El miércoles cerrará el plazo para acceder a la ayuda.
En lo que a fútbol se refiere, horas después de haberse conocido el paquete de medidas, fue Ferro el primer club en sumarse al programa para poder hacerle frente a la planilla salarial. Pero, claro, el “Verdolaga” no es el único. Argentinos y Banfield también ya manifestaron su intención de tomar algo del oxígeno económico que surgió desde el Gobierno nacional. También, se estima que la gran mayoría de los clubes del ascenso intentarán sumarse a la movida para sostener una economía que ingresó en zona roja a causa de las secuelas que, se vislumbra, puede dejar este parate.
Con las actividades deportivas paradas, la caída en los ingresos de los clubes fue casi total. Por eso, la mayoría ya comenzó a idear una ingeniería financiera para poder dejar atrás el mal momento y hacerles frente a los compromisos adquiridos.