Sin solución a la vista, el paro de choferes cumple siete días

La medida de fuerza continuará hasta que se abone el sueldo de abril, sostienen en UTA.

PARADA VACÍA. La reapertura del comercio se vio resentida por el paro.  PARADA VACÍA. La reapertura del comercio se vio resentida por el paro. LA GACETA / ANTONIO FERRONI

Tucumán cumple hoy una semana completa sin circulación de ómnibus en las calles. El paro que dispuso la filial local de Unión Tranviarios Automotor (UTA), en consonancia con la dirigencia sindical de otras provincias, continuaría por lo menos hasta la mitad de esta semana. Así lo anticipó a LA GACETA César González, secretario general de la agrupación que nuclea a los choferes de colectivos.

“La medida está decretada hasta que los trabajadores perciban las remuneraciones adeudadas del mes de abril. Acá, por lo visto, la solución está bastante lejos”, expresó el titular de UTA Tucumán. Según declaró, el paro está previsto hasta el miércoles al mediodía, en principio. Ocurre que ese día, a las 11.30, habrá una reunión entre los representantes nacionales del gremio, la cúpula empresarial y autoridades de los ministerios de Transporte y Trabajo de la Nación.

Más allá de lo que se resuelva pasado mañana a nivel nacional, el paro podría ser levantado antes en la provincia “si los empresarios abonan el sueldo correspondiente”. “Si eso pasa, saldremos a trabajar. El problema es que hay líneas que presentaron mal la documentación y no se han girado aún los subsidios nacionales”, indicó González ayer.

Al menos 16 provincias continúan en una situación similar a Tucumán. “En los lugares donde se resolvió fue porque se pagó lo que estaba adeudado”, dijo el gremialista. En el caso local, UTA reclama el pago del sueldo de abril de unos 4.000 trabajadores del sector. “Espero que haya canales de diálogo pronto. Hay mucho malestar”, fustigó.

“Un cuello de botella”

Desde la Asociación de Empresarios del Transporte (Aetat) estiman que la falta de usuarios por la cuarentena obligatoria ha implicado una caída del 85% en su recaudación. Así, aseveran que no disponen de fondos para cumplir los pagos pendientes. “La actividad ya venía en problemas y la pandemia nos terminó de liquidar”, manifestó Jorge Berretta, directivo a cargo de la entidad.

En diálogo con este diario, el empresario aseguró que hasta ayer a la tarde no había recibido “novedades” que pudieran destrabar el conflicto. En concreto, hizo referencia al giro de subsidios que permitan abonar los sueldos adedudados. “No hubo avances. Tengo el teléfono abierto y no recibí ningún llamado”, afirmó. “Los Gobiernos nacional y provincial no pueden seguir ignorando lo que pasa. Ellos son parte del problema y de la solución”, puntualizó.

Berretta graficó la situación del siguiente modo: “desde el sector empresario estamos dispuestos a resignar cosas. Venimos trabajando a base de endeudamiento, pero lo que no podemos es superar este cuello de botella. No tenemos cómo afrontar los salarios y garantizar el servicio a la vez”.

El empresario consideró que hablar de una solución con los subsidios preexistentes a la pandemia, sin considerar la merma actual en los ingresos, “no es posible”. “Para salvar el sistema, y no a las empresas, es necesario que se le acredite al transporte púbico de Tucumán lo que fue presupuestado por la Legislatura”, sostuvo.

Según calculó Berretta, el 65% de la recaudación del transporte en el interior corre por cuenta de los boletos que pagan los usuarios. En contraste -expuso- en Buenos Aires el 70% de los ingresos son obtenidos por subsisdios.

Respecto al atentado que sufrió la sede empresaria durante la madrugada del sábado, el directivo opinó que existe un “clima enrarecido”. “Insisto: acá no hay presión nuestra, sino voluntarismo. Debemos avanzar con un diálogo que permita resolver los problemas del servicio, que vienen desde hace años y que ahora se agravaron”, finalizó.

Comentarios