Probar las fortalezas y debilidades del Sistema Provincial de Salud (Siprosa) -y de otras áreas oficiales- ante un eventual foco infeccioso de coronavirus. Esa será una de las enseñanzas que pretende dejar el simulacro que el Gobierno realizará el viernes de la semana que viene para medir su nivel de respuesta frente a un posible brote de la enfermedad viral en algún barrio vulnerable de Tucumán. El procedimiento fue confirmado a LA GACETA por el director de Emergencias Sanitarias del Siprosa, Francisco Barreiro, quien explicó los detalles de la iniciativa inédita.
El simulacro forma parte de las acciones que lleva adelante el Comité Operativo de Emergencia (COE) en el marco de la pandemia. Según expuso el funcionario, se buscará imitar una “situación de máxima” en donde se debe bloquear un barrio -de cualquier tamaño- cuya población presenta necesidades básicas insatisfechas (como hacinamiento) y se han multiplicado los casos de covid-19.
El procedimiento ocurrirá el viernes 26, de 8 a 12, en el Liceo Militar. Allí hay una casa deshabitada que pertenecía a las fuerzas armadas -informaron- y que simulará en esta situación ser un “barrio popular” con al menos 50 personas infectadas. En ese escenario hipotético, los profesionales de la salud deberán realizar el triaje de los pacientes (su selección y clasificación tras evaluar las necesidades terapeúticas que presentan y los recursos disponibles del sistema), así como las derivaciones necesarias a los hospitales. También intervendrían en el proceso personal de Desarrollo Social, de Seguridad e incluso Tránsito, por lo que su coordinación es mixta.
“Si bien es una iniciativa del Ministerio de Salud para medir la vulnerabilidad del sistema, también sirve para evaluar cómo funcionan los demás servicios en conjunto. Es decir, cómo se articula el Siprosa con los demás requerimientos”, especificó Barreiro. Según transmitió, este simulacro busca también reforzar la organización sobre la atención de los pacientes. En contraste, por ejemplo, un simulacro de accidente privilegia la inmediatez con la que actúan los servicios de emergencia.
“Es la primera vez que realizamos un ejercicio de estas características. El despliegue es grande”, dijo el director de Emergencias del 107. En ese sentido, calculó que entre 400 y 500 personas serán movilizadas en el operativo. “Estamos definiendo los protocolos de seguridad de quienes intervendrán. Esas personas serán censadas y se les realizará algún test rápido para resguardar a todos”, apuntó. La iniciativa -concluyó- toma como experiencia el desborde de casos en barrios vulnerables de Buenos Aires.