24 Agosto 2020
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Hace más de 50 días que está internado. Había entrado al hospital de Niños por un cuadro de apendicitis, pero por algún motivo tuvo problemas neuronales y ahora está en coma. Fabricio Cabrera tiene 10 años y, en lugar de estar jugando con sus amigos, está postrado en una cama de hospital.
"Mi hijo ya no me ve, no me escucha, no me siente", dijo a LAGACETA.COM Natalia Ibañez, madre del pequeño. La mujer entró con Fabricio caminando por un dolor abdominal, pero nunca se imaginó que casi dos meses más tarde continuaría allí.
El 30 de junio el niño fue intervenido quirúrgicamente por una apendicitis. Luego de la cirugía, el estado de salud del niño se había complicado gravemente y la madre afirma que nunca le explicaron qué había pasado en el quirófano. Los abogados que acompañan a la familia Cabrera señalaron que hasta el día de hoy los padres del niño no obtuvieron un esclarecimiento sobre la situación, y que incluso se les dejó de entregar partes médicos sobre la evolución.
Emocionada, Ibáñez mencionó que su hijo está muy grave y que empeora cada día un poquito más. "Salí muy mal después de verlo. Ya no mueve los ojitos, antes aunque sea lo hacía por reflejo", contó.
La mujer explicó que esta mañana notó que le cambiaron la sonda y que le dijeron que fue porque su estómago está paralizado, por lo que ahora va directamente a los intestinos.
"Nadie me explica nada, no sé qué tiene mi hijo, sólo se que entró en coma él mismo, no fue inducido", agregó.
Fabricio duerme en una cama de hospital hace más de 50 días. En su habitación hay otros cuatro niños en terapia. Su familia lo espera a diario en la puerta del hospital, donde colgaron carteles y pancartas con pedidos de esclarecer la situación. Allegados y letrados hablan de mala praxis.
Denuncia
La familia Cabrera instaló un gazebo en la puerta del nosocomio y carteles en los canteros de la entrada. Días atrás, una supuesta empleada del hospital salió con un bisturí y cortó los carteles y la carpa.
Natalia hizo la denuncia correspondiente por los daños generados. "No molestamos a nadie, no entiendo por qué esa mujer hizo eso", dijo y comentó que solo ingresan a las instalaciones para ver al niño ya que tienen prohibido el uso del baño.
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