16 Octubre 2020
MÁS TRANQUILOS. La llegada de Varela les quitó a Orsi y a Gómez un peso de encima en lo referido a la conformación de la última línea. la gaceta / foto de diego aráoz
En los pasillos de La Ciudadela desde hace varias semanas aseguraban que el regreso de la actividad oficial sería en noviembre. Por eso, la confirmación de que el reinicio de la Primera Nacional será el 7 de ese mes no causó ninguna sorpresa. “Es más o menos la fecha que preveíamos”, aseguró un allegado a la mesa chica del departamento fútbol.
Pese a que la pelota ya tiene fecha para volver a rodar, por ahora no hay nada concreto sobre cómo se jugará la definición del torneo. “Hay que esperar”, repiten desde el club, prefiriendo no adelantarse a los hechos, ni hacer futurología sobre en qué instancia ingresaría el “Santo”.
Si bien algunas versiones indican que la idea de los dirigentes encargados de darle forma al torneo es que los equipos vayan sumándose de acuerdo al mérito deportivo (en este caso, San Martín y Atlanta empezarían en semifinales), todo se definirá en las próximas horas, en una reunión virtual de la mesa de la categoría, que deberá elevar el formato al Comité Ejecutivo para que sea aprobado.
Mientras tanto, Favio Orsi y Sergio Gómez prefieren ocupar su tiempo en que el equipo vuelva a ser lo que fue. La llegada de Joaquín Varela les sacó un peso de encima, porque de a poco la última línea va quedando lista.
En todas las posiciones hay variantes y eso es algo clave para la dupla. Pier Barrios parece una fija por derecha; aunque en esa posición también pueden jugar Emiliano Purita, Juan Orellana y hasta Gustavo Abregú. En tanto, por la franja izquierda, las opciones son Lucas Diarte y Maximiliano Martínez.
Con Varela, el medio de la zaga va tomando más color. El “Cata” se suma a Orellana y a Abregú; aunque Barrios también pueda moverse como central.
Pero los DT quieren más y ahí apuntan. “Estamos esperando la respuesta de los centrales con los que tuvimos contacto”, aseguraron.
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