El Consejo Directivo del Colegio de Abogados de la Capital resolvió reabrir la investigación de la denuncia de transgresiones éticas que la ciudadana Roxana Teves presentó en 2017 contra los abogados Alfredo Falú, Ana Lucía Jiménez y Edmundo Javier Jiménez, los últimos dos hijos del ministro público fiscal Edmundo Jiménez (con licencia desde poco después del comienzo de la cuarentena). Marcelo Billone, presidente de la entidad, comunicó a la denunciante que las actuaciones habían sido pasadas a la comisión de ejercicio de la profesión. Los consejeros también habrían resuelto formar un expediente separado a los fines de resolver la admisibilidad de la impugnación de Teves contra el letrado René Goane (h).
La reactivación del procedimiento ético es un efecto indirecto de la crisis institucional que generó la denuncia penal del juez Enrique Pedicone contra el vocal de la Corte Suprema, Daniel Leiva. Teves formó parte del grupo de víctimas de la violencia institucional que apoyó a Pedicone incluso mediante la exposición de la crisis ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos mientras que Falú es uno de los que pidió a la Legislatura que destituya al denunciante de Leiva por, entre otros motivos, su proceder en la exposición de las supuestas presiones del vocal para “manejar las intensidades” de una causa del legislador Ricardo Bussi. En medio de estas tensiones, Teves reclamó al Colegio que no haya investigado la actuación profesional de Falú, de los hermanos Jiménez y de Goane en una causa en la que ella dice haber sido despojada de sus bienes mediante la acción de abogados, fiscales y jueces comandados por el ministro público fiscal.