Según ATEP, la mayoría de los docentes acepta ser vacunado

Llegaron 6.000 dosis de la segunda tanda de la vacuna rusa y se anunció que en febrero se vacunarán a docentes. ¿Qué dicen los maestros respecto de volver a las aulas? La dirigencia no cree que se llegue a vacunar a todos los docentes y que no todos aceptan ser inoculados, según una encuesta de ATEP entre sus afiliados.

Las dosis de Sputnik que arribaron el miércoles fueron distribuidas a los 14 nodos de vacunación, y servirán para completar el proceso de inmunización contra la covid-19 que se inició en diciembre con la aplicación del primer componente al personal de salud. “Para nosotros esto es una luz de esperanza, es muy importante para toda la población que podamos tener la accesibilidad a esta segunda dosis en tiempo y forma’’, manifestó la ministra de salud, Rossana Chahla, y agregó que el Gobierno se encuentra a la espera de otra partida de vacunas para poder continuar inmunizando al personal esencial de seguridad y a los mayores de 60 años, luego de ser aprobada su aplicación por la Anmat.

Con respecto a las dudas sobre la capacidad de desarrollar inmunización, una vez aplicadas ambas dosis, desde el Ministerio se está configurando un protocolo para el estudio de anticuerpos basales. Si bien se estima que estos últimos se generan transcurridos 14 días de aplicada la segunda vacuna, de igual manera se analizarán los días 14, 30, 90, 180 y 360. Esto implica el seguimiento de más de 500 personas, algunas de ellas que atravesaron la enfermedad y otras no.

La titular de la cartera de Salud, sostuvo que los efectos que produce la aplicación son similares a los que provoca la colocación de cualquier otra vacuna, como por ejemplo la antigripal: dolor localizado o del cuerpo en general y cefalea. Además aseguró que en quienes recibieron la dosis, transcurridas las primeras 24 a 48 horas el malestar cedió.

“Del personal de la salud contamos con 5.000 personas que están afectadas a la atención de la Covid y de ese total alrededor de un 80% optó por vacunarse. La vacunación es voluntaria, tratamos de convocar y de reiterar la cita posteriormente para abrir la posibilidad si la persona que no quiso recibirla cambia de opinión”, afirmó la funcionaria.

 Pilar Cabrera, médica infectóloga, recibió la segunda dosis y comentó que la situación fue similar a las demás vacunas que recibió. “La experiencia fue buena, nos asesoraron, tuvimos primero un checklist para ver si teníamos alguna contraindicación formal a la vacunación y luego pasamos a recibirla. Después de recibir la primera solo sentí un leve decaimiento y cefalea, igual que con la vacuna antigripal, o de la hepatitis b, o la triple viral contra la recirculación del sarampión, los efectos son leves, pasajeros y la recuperación es rápida’’, sostuvo.

El secretario ejecutivo médico del Siprosa, Luis Medina Ruiz, hizo hincapié en que la única manera de controlar cualquier situación epidemiológica es con la vacuna: “tenemos una oportunidad única al contar con la vacuna, accesible y gratuita. No hay que desaprovecharlo”.

El funcionario comunicó también que en la página web del Ministerio se proporcionará información sobre el seguimiento de efectos adversos y que el proyecto de medición de anticuerpos permitirá saber con certeza en qué porcentaje se produjo y cuánto perdura la inmunización. El seguimiento se hará hasta el cumplimiento de un año de colocación de la vacuna.

Una vuelta dudosa

Actualmente, la situación epidemiológica que atraviesa la provincia es la de una “meseta de contagios” que permanece elevada. Ante esto, Medina Ruiz manifestó que desde el ministerio se apunta a un promedio de menos de 50 casos por día para poder retomar la presencialidad de las clases. Agregó que si bien la curva parece tomar el mismo ritmo descendiente que el de principios de diciembre, “no es momento de relajarse. Una situación bajo control sería tener menos de 100 casos por día’’.

Con el anuncio de vacunación para los docentes que realizó el Ministerio de educación de la Nación, los gremios fijaron su punto de vista y manifestaron sus preocupaciones a LA GACETA.

“Lo importante es que la vacuna no sea imprescindible sino un requisito más’’ comentó Bernardo Beltrán, secretario general de Sadop. Destacó la complejidad del asunto haciendo hincapié en que el tema “vacuna si, vacuna no’’ se fue partidizando y sostuvo que desde el sindicato no hay una postura fija, sino que es una decisión personal de cada maestro. “Aunque se habilite la vacunación para docentes, no creo que se llegue a vacunar a todos, por lo que se debe seguir respetando el protocolo’’, agregó.

Por otro lado, el titular de ATEP, David Toledo, comentó que el gremio se realizó una encuesta a fin de conocer la postura de cada docente sobre aplicarse la dosis. “La mayoría de los compañeros manifestó sus ganas de hacerlo, pero al no ser obligatorio, también hay quienes todavía se abstienen y quieren esperar un tiempo más para conocer qué aconsejan los expertos’’, afirmó.

Al igual que Beltrán, Toledo aseguró que la vacuna no debe ser el único requisito para el retorno a las aulas, sino que deben priorizarse otras medidas de bioseguridad. Resaltó que luego de hacer un recorrido por las escuelas en las últimas semanas para analizar el estado, muchas de ellas no se encuentran en condiciones para recibir alumnos debido a la falta de recursos, como la provisión básica de agua potable. “Como máximo podrían asistir 10 chicos por aula y eso complicaría el sistema, ya que no todos tienen acceso o conectividad a internet. De igual manera, al Gobierno todavía le queda tiempo para priorizar el arreglo y dejar a los establecimientos en óptimas condiciones’’, enfatizó.